La batalla para que el
Archivo de Salamanca no se convierta en un nuevo tributo del Gobierno a los nacionalistas catalanes no ha hecho más que comenzar. “Ahora empezamos la batalla seria, la jurídica”, dice el alcalde de Salamanca,
Julián Lanzarote. Para empezar, el Parlamento castellano-leonés ha aprobado una reforma para que el Archivo pase a ser competencia de esta comunidad. Cultura ha anunciado que irá al Tribunal Constitucional. Javier Gómez de Liaño defenderá la iniciativa de la Cámara castellano-leonesa en este conflicto de competencias.