Tres meses después, el Gobierno ha admitido que conocía el
informe de la Guardia Civil del 21 de diciembre de 2005 en el que alertaba de la
muerte masiva de inmigrantes procedentes de Mauritania. El ministro Bono dice que la información procede del CNI y que fue trasladada a las autoridades competentes. Horas antes,
Rubalcaba negó que el Ejecutivo hubiera recibido la citada nota.
"Eso se lo garantizo, porque si hubiera llegado, se hubiera actuado como se ha actuado ahora", dijo en Onda Cero. Mientras,
José Antonio Alonso guardó silencio. La AUGC exige saber quién es el responsable.