Nada cambiará en la política del Gobierno, después de siete protestas masivas, pidiéndole que derrote a –no dialogue con– ETA. El presidente ha decidido que el clamor, sencillamente, no existe, mientras los subalternos redoblan la campaña contra las víctimas y contra el PP. Diego López Garrido acusa el golpe que para el PSOE ha supuesto la identificación de la resistencia cívica a ETA con la bandera y el himno de España. Tenso, demudado, el portavoz parlamentario ha acusado al PP de "apropiarse de los símbolos nacionales" y ha vuelto a echar mano de la guerra de Irak. Los puntos de vista del PP van de una nueva oferta de Rajoy para un consenso anti-terrorista con el PSOE a la exigencia de Acebes de que se escuche a la calle, donde está –ha dicho– "la verdadera unidad contra ETA". Así ha retransmitido el 3-F LIBERTAD DIGITAL TELEVISIÓN.



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Dieciocho de los 19 terroristas de Jarrai huidos de la Justicia desde el 19 de enero tras ser condenados por el Supremo, y a los que Rubalcaba prometió capturar en cuestión de horas, se han encerrado este domingo en un frontón de Bilbao, retando a la Ertzaintza a detenerles. El PSOE se ha apresurado a atribuirse este desafío como si de un éxito se tratase. Desde el PP, Ángel Acebes ha acusado de "ineficacia" al Ministerio del Interior. Según ha informado Europa Press, Batasuna-ETA pidió al Gobierno tiempo para poder tomar decisiones tras el atentado del pasado 30 diciembre. Otegi y el presidente del PSE, Eguiguren, se reunieron la misma mañana del bombazo, según se ha confirmado.