Cincuenta de los cien policías españoles enviados por el Gobierno a Mauritania para identificar y repatriar a los 369 inmigrantes que se encontraban en el
Marine I ya están de vuelta.
Libertad Digital Televisión ha acudido a Barajas para recibir a los indignados agentes. Su situación, tal y como relataba uno de ellos, ha sido "pésima, patética". Los policías, que han permanecido 72 horas sin dormir y sin comer prácticamente nada, han calificado su servicio como el "peor" de toda su vida, que además, según ha dicho uno de ellos, "no está pagado". La voz de alarma la puso la
Confederación Española de Policía, que además informó de que Mauritania
les impedía salir del país.