El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y el jefe de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, han anunciado que la UE revisará de forma "urgente" y "en los próximos días" sus relaciones con Egipto y "adoptará medidas" en respuesta a la violencia que sacude el país desde el desalojo de dos campamentos islamistas el pasado miércoles.
En un comunicado conjunto, Van Rompuy y Barroso han abogado por "el fin de la violencia, la reanudación del diálogo político y la vuelta del proceso democrático" en Egipto, país al que la UE ha apoyado "durante los últimos dos años" en su intento de avanzar hacia la democracia y al que considera un "aliado clave".
"Nos hemos implicado de forma frecuente y activa con los líderes de Egipto y las nuevas fuerzas políticas", han explicado, en una nota en la que han llamado a las autoridades a escuchar las peticiones de democracia y libertad formuladas por la población.
En este sentido, han advertido de que estas reivindicaciones no pueden quedar empañadas por la "sangre" de los últimos enfrentamientos entre fuerzas de seguridad e islamistas, que han dejado cientos de muertos.
Para Van Rompuy y Barroso, los acontecimientos de los últimos días son "extremadamente preocupantes" y han pedido contención a las partes para evitar una escalada de violencia de "consecuencias impredecibles".
"Lamentamos profundamente que los esfuerzos y propuestas de la comunidad internacional para tender puentes e iniciar un proceso político inclusivo, a los cuales la UE ha contribuido de forma activa, quedasen relegados y, en su lugar, se iniciase una confrontación", han agregado.
Los líderes del Consejo Europeo y de la Comisión Europea han apuntado que la senda de la violencia no supondrá ningún "éxito" para el país, por lo que han considerado "clave" su fin "inmediato". "No hay alternativa al diálogo", han recalcado.
Aunque Barroso y Van Rompuy han extendido a "todas" las partes el llamamiento a la "máxima contención", han señalado la "particular responsabilidad" que tienen las autoridades interinas y el Ejército para poner fin a los enfrentamientos.
Así, y frente a quienes desde el actual Gobierno egipcio intentan defender la represión policial y militar, los líderes europeos han respondido que "no se puede justificar la violencia y las muertes de los últimos días. Han exigido el "respeto" de los Derechos Humanos y la liberación de todos los presos políticos.
El presidente de Francia, François Hollande, mantuvo el viernes sendas conversaciones telefónicas con la canciller alemana, Angela Merkel, el primer ministro británico, David Cameron, y el jefe del Gobierno italiano, Enrico Letta, para tratar de coordinar una respuesta europea a la crisis que atraviesa Egipto. De dichos contactos salió el compromiso, aún sin concretar, de adoptar medidas cuanto antes, al igual que se planteó una reunión inminente de los ministros de Exteriores de los Veintiocho.