El diario mexicano El Universal publicó este pasado fin de semana fotografías de algunos miembros de los grupos de autodefensa del estado mexicano de Michoacán dentro de la casa de uno de los jefes narcotraficantes de los Caballeros Templarios llamado El Botas. Se trata de auténticas mansiones con numerosas y amplias habitaciones, grandes piscinas, palmeras, y todo tipo de objetos de lujo.
Según el diario, las autodefensas mantienen su avance "en la recuperación de pueblos y localidades donde los Templarios ejercían el control" y este mismo lunes, sus líderes mostraron su satisfacción por la captura de Jesús Vásquez, alias El Toro, considerado uno de los siete cabecillas del mencionado cártel del narcotráfico y el crimen organizado. El Toro figura en la lista de los siete máximos dirigentes "templarios" cuya detención exigen las autodefensas como condición para entregar las armas a las autoridades federales y regresar a sus comunidades de origen.
El Gobierno mexicano inició una amplia operación para restablecer el orden en la región, escenario de choques armados entre Los Caballeros Templarios y los grupos de civiles que en febrero de 2013 tomaron las armas para defenderse de esa organización criminal ante la falta de respuesta del Estado. El conflicto se había agudizado en las últimas semanas ante la expansión de los grupos de autodefensa. El secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Monte Alejandro Rubido, aseguró que hay "avances significativos" y precisó que hasta ahora hay 46 detenidos en los 27 municipios de la zona sur del estado donde operan las fuerzas federales.
Hipólito Mora, de las autodefensas, señaló a la emisora MVS que están cooperando con las autoridades federales y que les están "pasando información de donde están esos rateros y asesinos".
Blindaje para varios estados
En una reunión entre el Gobierno y los gobernadores de los estados colindantes con Michoacán, se llegó a "acuerdos para realizar acciones conjuntas de prevención y de protección para la población de dichas entidades federativas" ante los efectos que pudieran tener las acciones de seguridad en Michoacán.
El gobernador de Hidalgo, Francisco Olvera, declaró a una emisora de radio que la ola de violencia que vive Michoacán afecta a todos los estados porque "genera un clima de incertidumbre" que pone en evidencia a las instituciones públicas.