Hace ya buen tiempo que se viene especulando sobre la participación política de Máximo Kirchner, hijo mayor del matrimonio presidencial argentino de Néstor Kirchner y Cristina Fernández. De hecho, es una de las alternativas del kirchnerismo en caso de que finalmente la presidenta no opte o no logre la reforma constitucional para una posible re-reelección.
Este mismo domingo, Máximo –líder de la organización juvenil kirchneista de La Cámpora– hizo una aparición pública en un acto de apoyo a su madre con un objetivo claro: pedir a los argentinos que apoyen esa posible re-reelección y por eso pidió a la oposición que "no le tenga miedo a las urnas" y permita a su madre presentarse. Para muchos, se trata de una clara campaña para que Máximo comience a hacerse un lugar ya no como dirigente juvenil sino en la misma organización política. Aunque pocos lo conocen públicamente, ya en octubre de 2011 el portal Terra de Argentina publicó un informe que tituló "Cómo vive Máximo Kirchner, el hombre más influyente del país". El medio señalaba que su "hermetismo" lo había convertido "en uno de los hombres más temibles en la mesa donde se toman las decisiones más importantes del Gobierno de su madre".
Durante el acto, en el que estuvo acompañado por sus compañeros, Máximo desafió a los opositores en un tono cada vez más político y dijo que si su madre perdía, "nosotros volveremos a las calles, a hacer lo que tenemos que hacer y a reconstruir la fuerza política para volver a gobernar la Argentina en los próximos años". Antes de hablar sobre la reelección, advirtió: "Por lo que voy a decir quizá voy a tener que pedir la casa de un compañero hoy para dormir, porque creo que Cristina se va a enojar". Después señaló que "si Cristina es tan mala o no sirve, si están tan interesados en terminar con esta experiencia política, si quieren acabar con el kirchnerismo, ¿por qué no compiten con Cristina, le ganan a Cristina y sanseacabó?".
Como era de esperar, el discurso de Máximo fue alabado por los dirigentes kirchneristas. El ministro de Economía, Axel Kicillof, dijo que fue una "intervención políticamente esclarecedora" que dejó claro "que hay un proyecto", algo que podría confirmar las claras aspiraciones del hijo de la presidenta de liderar el partido cuando llegue el momento de tomar la posta de su madre.
La Constitución argentina prohíbe que Fernández, que gobierna Argentina desde 2007, se presente a una nueva reelección en los comicios de 2015 y ella misma ya descartó esa posibilidad. Sin embargo, no son pocos los que creen que esa campaña de su partido para lograr que siga en el poder apenas ha comenzado, y la aparición de Máximo este domingo podría parte de ella.
Mal momento de Cristina
Este acto celebrado en el estadio de Argentinos Juniors coincide con uno de los momentos más bajos de Cristina Fernández. Según una encuesta de la consultora Management & Fit, publicada por el diario Clarín, la imagen negativa de la presidenta ascendió al 43,8% este mes, el porcentaje más alto desde el pasado mayo. Los datos apuntan que la imagen positiva de Fernández cayó al 26,5%, dos puntos por debajo de la que tenía hace un mes y muy lejos del 59,1% de su pico máximo, alcanzado en febrero de 2012, al inicio de su segundo mandato.
El sondeo revela también un fuerte rechazo a la gestión del Gobierno, ya que seis de cada diez argentinos desaprueba su forma de conducir el país, mientras que sólo tres de cada diez la respalda. El miembro peor valorado del Gabinete argentino es de lejos el vicepresidente, Amado Boudou, procesado en dos causas por presunta corrupción: el 66,7% tiene una imagen negativa de él y sólo el 6,1% dice que es positiva.