El pasado sábado el periodista Melchor Miralles vivió en México uno de los momentos más complicados de su vida. El columnista del diario ABC ha contado en Es la Tarde de Dieter de esRadio cómo estuvo a punto de ser raptado por miembros de uno de los cárteles que pueblan México por culpa de un documental que denuncia el trato a los migrantes que cruzan el país hasta EEUU.
Miralles estaba en su habitación en un hotel en Tapachulas, en el estado mexicano de Chiapas, con cinco compañeros de la productora con la que ruedan el documental cuando a las tres de la madrugada sonó el teléfono.
El periodista ha explicado que en un principio pensó que era un secuestro exprés, que se resuelven con un pago y que en muchos casos se organizan desde la propia cárcel, e intentó convencerles con dinero pero cuando insistieron en que bajara y entrara en un coche tuvo claro que no saldría del hotel.
Durante unos 55 minutos Miralles entretuvo a los narcos que decían que "entrarían pegando tiros" y con su teléfono móvil se puso en contacto con el resto del equipo que pudo hablar con la policía española y su contacto en México.
El periodista ha dicho que le tenían vigilado porque sabían "lo del documental" y dieron su nombre y apellidos. Además amenazaron con matar a su familia que estaba en Madrid. No sabe de dónde sacó las fuerzas y ha dado las gracias a Dios porque le "acompañó" y le dio "fuerza" para poder hacer frente a esa llamada.
Ha señalado que cuando llegó la policía mexicana tampoco estaba tranquilo porque "México es un estado comatoso en el que los poderes están trufados de delincuencia". Allí "cada día ocurren cosas cosas como éstas, desaparecen seres humanos todos los días". Los policías españoles con los que estaban en contacto le dijeron que no se le ocurriera meterse en el coche de los policías mexicanos.
Melchor Miralles ha contado además que tiene una sospecha de quién pudo ser el delator. Se trata de un ciudadano mexicano, del que no ha querido dar más datos, al que le dio "una determinada información" y que pudo ser el que se los pasó a los narcos..