Los partidos opositores que componen la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) esperan que la marcha de este jueves ayude a mostrar al mundo la grave situación que pasa la democracia en Venezuela. Sus portavoces creen que habrá en las calles de la capital cerca de un millón de personas, lo que convertiría a esta "Toma de Caracas" en una de las marchas más multitudinarias ocurridas en el país.
Pero el chavismo está listo para intentar neutralizarlo y para eso emprendió hace ya varios días una nueva ola de arrestos contra dirigentes opositores. Es así como en los últimos días, las fuerzas de seguridad del régimen han detenido hasta 25 opositores, tal y como ha denunciado la ONG Foro Penal. De estos hay 13 que siguen retenidos por las autoridades. Dos de ellos, Yon Goicoechea, de Voluntad Popular, y Carlos Melo, miembro de la dirección nacional de Avanzada Progresista, han sido acusados de preparar un golpe de Estado contra Nicolás Maduro, alentados, según el chavismo, por Estados Unidos.
Periodistas expulsados
Lo que tampoco quiere el chavismo es que el mundo se entere de lo que ocurra en la marcha de este 1 de septiembre, pese a que las redes sociales jugarán nuevamente un papel importante. Por eso, el Gobierno de Maduro negó la entrada a tres periodistas de medios internacionales: se trata de César Moreno, de Radio Caracol de Colombia, junto a Marie-Eve Detoeuf, del diario francés Le Monde, y John Otis, corresponsal de la radio estadounidense NRC. Este último señaló a través de su cuenta de Twitter que "mi viaje de prensa en Venezuela tiene un mal comienzo: estoy siendo deportado de vuelta a Colombia, junto a Detoeuf y Moreno".
Además, Otis informó acerca de la detención de Jim Wyss del Miami Herald. También se supo de la expulsión de otros dos periodistas de Al Jazeera y otras agencias de noticias. La editora ejecutiva del Herald, Aminda Marqués González, señaló que "Wyss viajó a Venezuela como periodista para informar de una historia que es extremadamente importante para nuestros lectores y América Latina" y agregó que "estaba haciendo su trabajo cuando fue detenido."
Por su parte, César Moreno publicó en la misma red social la imagen del documento en el que Caracas lo declara "persona no admisible" por no cumplir con los requisitos de la Legislación migratoria nacional.