El anuncio de una peluquería londinense, en el que se burlan del peinado del dictador norcoreano Kim Jong-Un, ha provocado que los mismísimos funcionarios de de la embajada de Corea del Norte se desplazaran hasta el local y exigieran a su dueño la retirada del cartel.
En declaraciones al diario London Evening Standard el dueño del salón de belleza, Mo Nabbach, explica lo sucedido. Según cuenta, dos funcionarios norcoreanos llegaron a su local y comenzaron a tomar fotos de su peluquería en el barrio de Ealing. "Los dos tipos llevaban traje y eran bastante serios", precisó.
Poco después, le ordenaron que retirara el cartel porque era "irrespetuoso". A lo que les contestó "esto es Inglaterra y no Corea del Norte" y que se buscaran unos abogados, explicó Nabbach.
La policía tuvo que intervenir para que el asunto no llegara a mayores. Tras ello, el dueño de la peluquería afirmó que lo sucedido "fue amenazante", por lo que finalmente retiró la imagen.