Un total de treinta países, diez de ellos árabes, han accedido formar una coalición para combatir al grupo terrorista conocido como Estado Islámico para frenar su expansión por Iraq.
Aunque dicha unión se encuentra en una fase preliminar, y todavía no se sabe que papel desempeñara cada país en esa gran misión, sí que se han fijado los tres objetivos principales: Respaldo político al gobierno en Iraq, búsqueda de soluciones en materia de seguridad y despliegue de ayuda humanitaria. En esa coalición de países no estará presente Irán, una de las mayores potencias militares en Oriente Medio. Situación que dificulta la futura batalla contra el yihadismo, ya que el territorio iraní supone un emplazamiento estratégico perfecto debido a su proximidad a los países atacados por EI.
Con motivo de esta noticia, el programa Luis Herrerha entrevistado a Manuel Ricardo Torres Soriano, profesor de ciencia política y experto en terrorismo yihadista para explicar en qué punto se encuentra EI.
Para Torres Soriano, una de las prioridades de los países que tienen ciudadanos combatiendo en Iraq "es identificar a dichas personas y detenerlas en su regreso a su tierra de origen". "El gran dilema de los llamados ‘retornados’ es los conocimientos que traen del campo de batalla", explica el profesor, "el terrorismo maneja números de pequeña cantidad, pero el problema es que por muy pocos que sean, pueden hacer mucho daño".
Explorando otros asuntos sobre el grupo terrorista en Iraq, Torres Soriano ha explicado que, según su opinión, "el mensaje de Estado Islámico está calando por motivos antropológicos". "Creemos que en gran parte la llamada a la yihad del grupo responde, para ciertas personas, preguntas como ¿Quién soy? ¿Cuál es mi cometido en la vida?...".
No obstante, el profesor también explica que el tipo de propaganda que más éxito tiene es el del "victimismo", la propaganda que "presenta a un pueblo musulmán oprimido por occidente". "Se podría decir que es una llamada de ayuda" aclara.
Por el contrario, Torres Soriano ha querido explicar que "los videos de ejecuciones masivas y de decapitaciones no caerían dentro del apartado de propaganda como tal, son más advertencias o amenazas". Sin embargo, según el profesor, opina que ese tipo de videos acabarán siendo "contraproducentes para el futuro de Estado Islámico". "Sabemos de radicales que no están de acuerdo ni cómodos conque imágenes tan cruentas estén ligadas a su movimiento" sentencia el profesor.