Lo he dicho muchas veces, pero lo voy a repetir una vez más. Sobre todo, porque hay una generación de jóvenes que desconocen el pasado más cercano.
La situación actual no es sino la infecta herencia de una compañía que al principio se llamó ATT; después Compañía Telefónica Nacional de España, y ahora Movistar -que hay que estar a la altura de los tiempos-.
Desde su más tierna infancia y gracias a su régimen de monopolio, "Telefónica" se dedicó a expoliar a los sufridos usuarios que si querían tener teléfono, tenían que pagar su parte proporcional de línea -algo así como si al coger un taxi, el taxista nos obligara a comprar una parte alícuota del vehículo-. Por supuesto, si usted había pagado la línea para un piso y se marchaba, no le devolvían el dinero y sí en cambio le volvían a cobrar la línea al nuevo inquilino aunque en realidad, ya estuviera puesta.
Los tiempos han cambiado y el monopolio ha desaparecido, pero los principios estaban establecidos y los nuevos operadores no iban a tirar por tierra un negocio tan suculento. De modo que todos se han dedicado a robarnos -un poquito menos-, pero seguimos teniendo servicios de Zambia a precios de Suecia.
En esto, como en muchas otras cosas no nos parecemos a los países de nuestro entorno. Y siempre que algún político con firma en periódico oficial nos mete la mano en el bolsillo, lo hacen para parecernos a "los países de nuestro entorno".
Estas cosas pasan en los países donde gobiernan ladrones y estafadores.
La más cara y la más lenta.
Nada tranquilos que tenemos la CMT, que pronto lo resuelve. Además creo que Telefónica de España, va a bajar el dividendo que reparte a sus accionistas.
Señores, que país, dan ganas de salir corriendo y no mirar a tras, no sea que te cobren por mirón.