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La SGAE cobra por el himno andaluz, regalado a la región por la familia Infante

La SGAE sigue aprovechando cualquier momento para seguir recibiendo dinero y ahora se ha sabido que cobra por el himno andaluz pese a que la familia Infante donó los derechos al pueblo. La familia de Blas Infante sólo percibió por la versión que interpretó Rocío Jurado en el cine.

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La SGAE sigue aprovechando cualquier momento para seguir recibiendo dinero y ahora se ha sabido que cobra por el himno andaluz pese a que la familia Infante donó los derechos al pueblo. La familia de Blas Infante sólo percibió por la versión que interpretó Rocío Jurado en el cine.

LD (Pedro de Tena) El 9 de julio de 2001, la Junta de Andalucía aprobó en Consejo de Gobierno un decreto por el que recibía de manos de la familia de Blas Infante la propiedad de la casa en la que éste vivió en Coria y los derechos de autor del Himno de Andalucía. Sin embargo, la Sociedad General de Autores y Editores mantiene el registro de esta obra en su base de datos a pesar de que la familia renunció a cobrar por ella. Es decir, la letra del Himno de Andalucía es de libre uso, y su música más conocida, la del maestro Albero, es lo único que faculta a la SGAE para cobrar por la representación pública del mismo. Lo cuenta ABC gracias a una pieza de Alberto García Reyes.

A pesar del regalo de la familia Infante al pueblo andaluz, resulta que en total hay nueve registros con ese título y sigue apareciendo el nombre de Blas Infante en tres de ellos. La obra "Himno de Andalucía", codificada como 141.084, tiene tres creadores según el archivo de la Sociedad: Blas Infante Pérez, Jesús Gluck Sarasibar y José Blas Vega del Valle. En la codificada como 153.551 sólo aparece Blas Infante. Y en la 432.237 están Infante y José Albero Francés. Los otros seis registros pertenecen a adaptadores, salvo en tres casos en los que los autores están inscritos como "compositores integrales de la pieza": dos del director de orquesta alicantino Miguel Sánchez Ruzafa y otro a nombre de Juan Gabriel García Escobar, hermano de Manolo Escobar.

La explicación de la SGAE no deja de ser curiosa. Según Luis Lozano, delegado de zona de la SGAE en Andalucía, "debe tratarse de piezas musicales que no tengan letra, por lo que no necesitan el permiso de la familia". Dicho permiso no es necesario en ningún caso tras la donación, ya que tras ese acto por parte de la familia la obra pasó a ser de dominio público y, según añade el propio Lozano, "si una obra es de dominio público cualquiera puede cogerla y adaptarla con su propio nombre. Sólo si tiene un autor, el adaptador tiene que pedirle permiso". Sin embargo, Blas Infante no ha sido retirado de sus registros, por lo que en la aplicación de las tarifas su obra sigue apareciendo.

Estanislao Naranjo Infante, nieto del creador del himno y la letra, Blas Infante, ha dicho: "Cuando se vendió la casa de mi abuelo a la Consejería de Relaciones Institucionales, en esa misma escritura pública se le donó al pueblo andaluz todos los derechos del Himno, pero hasta entonces nosotros sólo habíamos cobrado por una versión, que es la que cantó Rocío Jurado en la película La Lola se va a los Puertos".

Esa versión no está entre las nueve de la SGAE. Ni otra que Naranjo Infante etiqueta como la original en lo que a la música respecta: "La música está sacada del Santo Dios, que es popular de los Escolapios. La versión original para banda la hizo José del Castillo. Después se hizo la versión de Albero que es la más conocida. Pero de ninguna de las dos hemos cobrado un duro nunca". Y es que la de Del Castillo tampoco aparece en la lista.

ABC insiste porque hay más. El nieto de Blas Infante no conoce a ninguno de los autores que aparecen en los tres registros en los que está el nombre de su abuelo, salvo a José Albero: "¿Jesús Gluck, José Blas Vega? Desconozco completamente a esas personas y no me parece correcto que cobren por el Himno porque se supone que la SGAE debe controlar eso y nosotros no sabemos nada". Lo curioso es que los derechos de la letra de Blas Infante se sigan gestionando en la SGAE a través de tres registros en 2009.

Lo curioso es que, sean los que sean, los derechos de la letra de Blas Infante se sigan gestionando en la SGAE a través de tres registros en 2009, ocho años después de que las tres hijas del autor, suscribieran un acuerdo con la Consejería de Relaciones Institucionales por el que cedían a la Junta los derechos sobre los símbolos de Andalucía. Este acuerdo fue refrendado ante notario el 26 de diciembre de 2001. En definitiva, pese a que tanto la letra como la música fueron anotadas por Blas Infante, su origen es netamente popular. El himno de Andalucía tiene la música, casi idéntica, de una canción religiosa de los segadores andaluces que inspiró a Blas Infante.

Según se cuenta incluso en el Centro Cultural de Andalucía de Buenos Aires, "el Himno Andaluz, en su melodía es una antigua canción religiosa de segadores andaluces. Desde tiempos inmemoriales, en el campo andaluz, singularmente en las zonas de cereal, se cantaba el Santo Dios, invocación a la Trinidad muy antigua en la Iglesia posterior al Concilio de Nicea (año 325), el Agios Theos, Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, hoy conservado en la liturgia del triduo de la Semana Santa.

En el Colegio de los Escolapios de Archidona, Málaga, en el periodo de 1896-1900, Blas Infante cantó con sus compañeros del internado en las misas de Comunión mensuales. Así lo disponía el Reglamento Colegial en su artículo 132. La melodía, transcrita con su letra por el P. Jesús M. Robredo en papel pautado, se conserva en el Archivo del Colegio. Coincide totalmente con la actualmente cantada. El documento esta depositado en el Archivo de los Escolapios de Granada. La letra dice así: "Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, lmbranos, lmbranos, Seqor, de todo mal Por la sal de nuestra frente, danos pan, salud, danos fe. Salva al pueblo que perece por tu nombre uno en tres."

Cuando Infante ejercía de notario de Cantillana (Sevilla) y en Isla Cristina (Huelva) tuvo ocasión de escuchar y anotar el Santo Dios; tal como él mismo lo atestigua en diversos pasajes de sus escritos: Este magnifico himno se canta en algunos pueblos andaluces por los segadores a la salida y la puesta del sol.

Lo emplean en Cantillana los segadores, en cuyo campo hube de anotarlo yo. En crepúsculos inolvidables, yo oí cantar el Santo Dios; Se entonan en algunos pueblos durante los solsticios, alrededor de maderos revestidos de ramajes y esmaltados de flores como el que cantan en algunos pueblos de la Sierra de Huelva, de entre los cuales tengo uno muy bello anotado en El Alosno durante una noche de San Juan. Mediante ellos se glorificaban los valores o empresas acometidas por la tribu. Estos cantos de los solsticios son restos indudables de la cultura heliolítica que se conserva en Andalucía. Los liberalistas andaluces, últimamente, adoptaron la música de este himno para himno de Andalucía.

La propia historia de la ciudad malagueña de Archidona recuerda el hecho de la siguiente forma: "Desde otra perspectiva, también hay que destacar personajes foráneos de la época que quedaron vinculados a la Historia de Archidona. Es el caso de Blas Infante Pérez de Vargas, Padre de la Patria Andaluza, quien cursó estudios en el Colegio de los Escolapios de Archidona desde sus 11 a sus 14 años (1896-1900).

Durante dicho periodo acumuló experiencias y recuerdos muy significativos para su vida y su pensamiento: la dura realidad social que veía en la "Puerta de la Guiropa" de la calle Colegio; la canción campesina "Santo Dios", cantada en el Colegio y que fue una de las bases del futuro Himno de Andalucía; el propio paisaje que oteaba desde el observatorio del Colegio."

El mismo Blas Infante lo cuenta de este mdo: "Este magnífico himno se canta en algunos pueblos andaluces por los segadores a la salida y la puesta del sol. Lo emplean en Cantillana los segadores, en cuyo campo hube de anotarlo yo. En crepúsculos inolvidables, yo oí cantar el "Santo Dios".

Se entonan en algunos pueblos durante los solsticios, alrededor de maderos revestidos de ramajes y esmaltados de flores como el que cantan en algunos pueblos de la Sierra de Huelva, de entre los cuales tengo uno muy bello anotado en El Alosno durante una noche de San Juan. Mediante ellos se glorificaban los valores o empresas acometidas por el tribu. Estos cantos de los solsticios son restos indudables de la cultura heliolítica que se conserva en Andalucía. Los liberalistas andaluces, últimamente, adoptaron la música de este himno para el himno de Andalucía".

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