Microsoft advierte de que una condena de la Comisión Europea “dañará a millones de consumidores”

L D (EFE) Precisamente si la Comisión Europea sopesa si castigar o no a Microsoft es para que no monopolice el sector del software y se fomente la competitividad. No es de la misma opinión Smith, quien señaló que "los consumidores quieren ordenadores más simples y no más complejos", a la vez que alertó de que "las medidas van a ralentizar el crecimiento europeo".

El representante de Microsoft se mostró convencido de la "fortaleza de sus argumentos", que expuso ante el Tribunal de Primera Instancia de la UE en Luxemburgo en la primera vista oral del litigio entre Microsoft y la CE por las medidas antimonopolio que el regulador comunitario impuso a la multinacional informática el pasado marzo.

Desde primeras horas de esta mañana, el presidente del Tribunal, el danés Bo Vesterdorf, escucha las alegaciones de ambas partes sobre la cuestión preliminar planteada en el proceso: la petición de Microsoft de que las órdenes de la CE se suspendan cautelarmente hasta que la justicia decida si fueron adecuadas.

Además de imponerle una multa de 497,2 millones de euros por abuso de posición dominante, la Comisión instó a la empresa de Bill Gates a separar el sistema operativo Windows y el reproductor multimedia Media Player, y a compartir fuentes de programación de Windows para garantizar su compatibilidad con servidores rivales.

Proceso para muchos años

La suspensión cautelar permitiría a Microsoft, que ya ha abonado la multa en una cuenta cerrada, esquivar las medidas correctivas durante los varios años que puede prolongarse el proceso de fondo.

Los cerca de dos docenas de representantes legales de Microsoft prevén alegar que una ejecución inmediata de las órdenes comunitarias dañaría de manera irrevocable los derechos de propiedad intelectual de la compañía, incluso si el Tribunal acaba considerándolas infundadas.

Los cuatro abogados de la CE, incluido el director de sus servicios legales Richard Wainwriht, defenderán en cambio que un aplazamiento de las medidas durante el tiempo que dure el proceso las dejaría sin efecto, dada la rápida evolución de los mercados tecnológicos.