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Microsoft se contradice de nuevo y ahora admite que el retrete virtual se iba a construir

El gigante informático Microsoft se contradijo a sí mismo en menos de 24 horas, al afirmar primero que “iLoo”, el famoso retrete virtual, no era un proyecto oficial de la compañía, sino una broma de su división británica. Horas más tarde, Microsoft se desdijo al afirmar que el retrete había sido un proyecto real, aunque la compañía había decidido abortarlo.

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L D (N.G.M.-Agencias) Microsoft ha conseguido salir en las portadas de los periódicos dos o tres veces a cuenta del anuncio, el desmentido y la rectificación del desmentido sobre la supuesta construcción de un inodoro portátil y cibernético que, entre otras cosas, incluiría un acceso a Internet. En un comunicado de prensa del 30 de abril, la división británica de Microsoft anunciaba, con toda seriedad, que estaba desarrollando un inodoro portátil que incluía un teclado inalámbrico, acceso a Internet y una pantalla plana. El anuncio de semejante artilugio, que según la compañía planeaba lanzar a mediados de este año en Gran Bretaña (coincidiendo con los festivales al aire libre que se celebran en este país) cautivó la atención de medios de comunicación de todo el mundo, como por ejemplo "The Wall Street Journal".

Sin embargo, fuentes de la compañía dijeron este martes por la mañana que todo se trataba de una broma, y se disculparon por las posibles molestias que la inocentada hubiera podido causar. Sin embargo, apenas unas horas después, este martes por la tarde, Microsoft se contradijo al afirmar que "iLoo" era un proyecto real de su división británica que fue abortado después de que el anuncio inicial de su desarrollo atrajera la atención de los medios y del público, que hicieron bromas y rechifla desde el 30 de abril a cuenta del inodoro de marras. Lisa Gurry, una de las directoras de producto de Microsoft, trató de aminorar el efecto de tanto anuncio luego desmentido afirmando que "iLoo" se pensó desarrollar simplemente como parte de una campaña para promocionar el servicio de MSN en los sitios más insospechados.

La misma campaña, según Gurry, había promovido antes el acceso a Internet en los parques londinenses y en sillas playeras en Francia. No obstante, posiblemente Microsoft haya conseguido el objetivo que buscaba. A pesar de las burlas por su estrambótico proyecto, ha estado en boca de todo el mundo durante varios días a cuenta de un artilugio tan inverosímil como inútil. En aplicación de aquel dicho, "Que hablen de nosotros, aunque sea mal".

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