Han sido casi 10 días los que hemos tenido que esperar para volver a oír la voz de Hugo Chávez, que desde el 14 de abril permanece en Cuba para seguir con su tratamiento. Los rumores han sido tales –algunos incluso llegaron a darlo como muerto– que se ha visto obligado a salir al paso y hacer un contacto telefónico con la cadena estatal VTV: "Tendremos lamentablemente, pueblo venezolano, que acostumbrarnos a vivir cruzados de rumores porque eso es parte de los laboratorios de guerra sucia, guerra psicológica activados día y noche en distintas partes del continente".
Además, Chávez aprovechó para anunciar que volverá el jueves a Caracas, aunque será apenas una visita a su país –las redes sociales, con ironía, hablan de una "visita oficial" a Venezuela– ya que el sábado tendrá que volver a Cuba para seguir con el tratamiento de radioterapia. También envío un mensaje a Henrique Capriles Radonski, quien este fin de semana dijo que gobernar a través de Twitter era una burla a Venezuela: "Es tan absurdo decir que estoy gobernando por Twitter, ¡es tan absurdo decir eso!".
Poco dijo sobre su enfermedad aunque llegó a apuntar que "me sacaron la sangre hoy y salí bien en todos los exámenes y me sigo recuperando" y también se preguntó "¿Qué podemos hacer con estos laboratorios de rumores? Habrá que salir a desmoronarlos (...) Pero a palabras necias, oídos sordo". Además, justificó su silencio apuntando que "estoy en radioterapia, compañeros, compañeras, pregúntenle a cualquiera lo que es radioterapia de cuatro a cinco semanas y, además, con el trabajo que yo tengo que asumir permanentemente".
Finalmente dijo que su proceso tiene "tratamientos duros y uno tiene que ponerse a la altura. Mucha voluntad, mucha fuerza, mucha fe. Es una transición y hacerle mucho caso al riguroso tratamiento médico, mucho reposo".