LD (Agencias) Las incursiones aéreas rusas en las últimas horas también se han extendido a la capital georgiana, Tiflis. Varios misiles y bombas han caído en los sistemas de telecomunicaciones y los radares militares que rodean la ciudad. El portavoz del Ministerio del Interior, Shota Utiashvili informó que "fueron atacadas desde el aire los radares situados en la montaña Majata". Precisó si las instalaciones habían resultadas dañadas en el bombardeo.
Según la emisora de radio Imedi, aviones rusos bombardearon la región de Zugdidi y la localidad de Senaki, en el oeste del país, junto a la también república separatista de Abjasia. También fueron sometidas a ataques aéreos las regiones de Jelvachauri, en el suroeste de Georgia, y el aeródromo Shiraki en el este del país.
Sin embargo, la aviación y la artillería pesada de las fuerzas armadas de Rusia están centrando sus bombardeos en la estratégica ciudad georgiana de Gori. De acuerdo con autoridades militares de Tiflis, decenas de vehículos blindados y tanques rusos han cruzado la frontera y se dirigen a la zona para cortar la principal vía férrea y una de sus más importantes carreteras. Las autoridades georgianas temen que el asalto ruso divida al país en dos.
El recuento de muertos y heridos por los últimos bombardeos y combates en esa zona del Caucaso es confuso. Fuentes georgianas afirman que los muertos superan ya los doscientos mientras que las autoridades de la separatista república de Osetia del Sur hablan de trescientos.
En el Mar Negro, frente a las costas de la separatista república de Abjasia, unidades navales rusas han hundido una lancha georgiana provista de misiles. Un portavoz del Kremlin indicó que "las lanchas de misiles georgianas en dos ocasiones intentaron atacar a los buques de guerra rusos".