El exministro del PSOE Carlos Solchaga ha afirmado este jueves que Cuba es un "caso perdido" desde el punto de vista de su "capacidad interna de transformación y evolución a la democracia". En su opinión, sólo cabe esperar "una muerte lenta del régimen" que permita descubrir su "extrema debilidad" y dé paso al "cambio" sin gran esfuerzo, como ocurrió con la caída de los regímenes comunistas de la Europa del Este en los años 80.
Así se ha pronunciado ante la Comisión de Asuntos Iberoamericanos del Senado, ante la que ha comparecido en su calidad de presidente de la Fundación Euroamérica, cargo que acaba de ceder a la excomisaria europea Benita Ferrero-Waldner. Solchaga ha considerado que la situación actual de Cuba es "todavía peor" que en 1993 –que ya era mala, ha dicho– en términos de "disponibilidad de recursos, liquidez internacional, creación de riqueza y nivel de bienestar".
Y esta situación es la que obliga al Estado "totalitario" a hacer determinadas cosas, como permitir que "un cubano le dé trabajo a otro", cuando el 50 por ciento de la población no tiene un empleo porque sólo está permitido que el Estado o una empresa estatal proporcione puestos de trabajo.
En su opinión, estos cambios que se están produciendo en Cuba ocurren "mucho más como consecuencia de las necesidades, que no por las virtudes de los mandatarios" a los que se debería denominar, ha matizado, "mandadores".
Solchaga también se refirió a Venezuela y ha reconocido que no espera cambios muy dramáticos en tanto en cuanto el Gobierno de Hugo Chávez "tenga rentas suficientes derivadas del petróleo como para poder seguir manteniendo una falsa política social de subvención casi permanente".
Tras señalar que el éxito de Chávez es también el "fracaso gigantesco" de la oposición, que áun no constituye una "alternativa clara", ha indicado que "no sería sorprendente" ver algún día una revolución en Venezuela "a la tunecina".
En la misma Comisión, y ya sin la presencia de Solchaga, el senador del PSOE Miguel Angel Uzquiza sostuvo que en la isla "soplan vientos de cambio" y que se van a ver más evoluciones "en un futuro próximo", durante el debate de una moción del PP sobre Cuba que no prosperó y que pretendía instar al Gobierno a que expresara públicamente su defensa de los Derechos Humanos en Cuba.
El senador del PP Dionisio García Carnero ha reclamado al Gobierno español que tome ejemplo del presidente de EEUU, Barack Obama, y haga una declaración expresa en defensa del respeto de los Derechos Humano en Cuba.