El presidente venezolano, Hugo Chávez, abrió este sábado la puerta para obtener poderes especiales que le permitan legislar por decreto, con el objetivo de acelerar su proyecto dictatorial en el país sudamericano.
La propuesta se presenta en unos momentos en los que la Asamblea Nacional impulsa un amplio paquete de leyes que afectarán a temas estratégicos como la educación, el trabajo, los procesos electorales, la economía y la propiedad.
"Si ustedes consideran que requieren refuerzos, entonces habilítenme de nuevo y vamos acelerando el trabajo", dijo el mandatario a varios diputados en un acto para conmemorar el décimo aniversario de la instalación de la Asamblea Nacional Constituyente que le permitió modificar la Constitución.
Chávez ha utilizado en varias ocasiones la ley habilitante, que le permite aprobar leyes sin necesidad de que sean sancionadas por el Parlamento, para profundizar su llamada "revolución socialista" con reformas en sectores como la agricultura, el comercio y la vivienda.
El mandatario instó a la Asamblea, conformada en su mayoría por diputados identificados con "el proceso", a anular todas las leyes "contrarrevolucionarias" antes de 2010, año en que se celebrarán elecciones legislativas en la nación latinoamericana.
"Que todavía tengamos una ley de educación del pasado es algo inexplicable, pero es verdad. Por eso yo les pido que aceleremos la discusión y la aprobación de las leyes revolucionarias en todos los ámbitos de la actividad nacional", dijo.
En 2008, tras perder un referéndum para reformar la Constitución, el mandatario venezolano fraguó un paquete de 26 decretos que fue promulgado vía habilitante y en el que incluía leyes como la que facilita la expropiación de plantas alimentarias o la modificación de las Fuerzas Armadas.
La oposición denunció que Chávez utilizó los poderes legislativos para implementar algunos de los aspectos más relevantes de la derrotada reforma.