L D (EFE) "Hemos dicho a Corea del Norte que la construcción de un reactor de agua ligera no está sobre la mesa" (de negociaciones), declaró Christopher Hill, máximo negociador estadounidense, tras la reunión con su homólogo norcoreano, el viceministro Kim Kye-gwan. "Ni EEUU ni ninguna de las otras partes está dispuesta a financiar un reactor de agua ligera", señaló Hill, quien hoy mantuvo una "larga discusión" con los representantes de Pyongyang sobre este tema.
"Yo hubiera preferido hablar de otra cosa, pero parece que para ellos esto es muy importante", declaró Hill. Corea del Norte dice necesitar este reactor para generar electricidad, ante la falta de recursos petrolíferos o gas en su territorio. "Si la cuestión es conseguir energía para poder iluminar los pueblos y las ciudades de Corea del Norte, la fórmula que está en la mesa es bastante completa", dijo Hill.
Esa propuesta (la cuarta presentada por China hasta ahora) incluye garantías de seguridad y ayuda económica, amén de una generosa oferta energética de Corea del Sur, que sirve "como una plataforma" a la que se sumarían, quizás, contribuciones de otros países. El estadounidense señaló que esta fórmula sería, además, mucho más económica y más rápida que la construcción de un reactor nuclear de agua ligera, ya que tardaría 2 ó 3 años en vez de 8 ó 9, y costaría menos. El reactor de agua ligera que pide Pyongyang costaría entre 2.000 y 3.000 millones de dólares, según estimaciones.
También Corea del Sur se manifestó en favor de esta opción, aunque su delegado, el viceministro Song Min-soon, dejó esa posibilidad para el futuro, al señalar que sólo "cuando Corea del Norte complete el desmantelamiento de su programa nuclear, podrá tener derecho al uso pacífico de la energía atómica". Para Hill, Pyongyang "claramente está interesado en continuar su programa nuclear".
El objetivo del diálogo es "el desmantelamiento de todos los programas nucleares norcoreanos con fines armamentísticos. Y todos los programas norcoreanos tienen fines armamentísticos. Con ellos no se encendió nunca ni una bombilla", apuntó. "De hecho, están pidiendo que otros países construyan ahora un reactor de agua ligera para un país que no es parte del tratado de no proliferación ni parte de la Organización Internacional de Energía Atómica".
Tokio y Pyongyang hablan sobre los ciudadanos japoneses secuestrados
Espera Hill que Pyongyang considere con cautela la oferta surcoreana, la mejor vía disponible para devolver la luz a Corea del Norte en cuestión de dos o tres años. "Seguiremos negociando, sin duda alguna", vaticinó el vicesecretario de Estado para el Este de Asia y el Pacífico, en su esperanza de que Corea del Norte no bloquee las negociaciones por esta cuestión del reactor.
Otra de las reuniones bilaterales mantenidas durante la jornada de este miércoles tuvo lugar entre Japón y Corea del Norte, donde de nuevo se volvió a hablar de la cuestión de los ciudadanos japoneses secuestrados por la inteligencia norcoreana en los años 70 y 80. Declaró Pyongyang estar "tratando adecuadamente" la cuestión, que se ha convertido en el mayor obstáculo para el establecimiento de relaciones diplomáticas bilaterales.
Las conversaciones bilaterales continuarán durante la jornada de mañana, en que también se celebrará una reunión de los jefes de las seis delegaciones que participan en el diálogo (China, Japón, EEUU, Rusia, y las dos Coreas). La crisis nuclear norcoreana estalló en 2002, cuando Washington acusó a Pyongyang de haber reanudado su programa nuclear, en violación de un acuerdo de 1994, a lo que el régimen estalinista reaccionó expulsando a los inspectores internacionales y saliéndose del tratado de no proliferación nuclear.