Según informó en una entrevista transmitida por Radio Republica, Haydée Galbán Casals, madre de Ricardo, fue conducida desde Baracoa hasta la Prisión Provincial de Guantánamo a las 3:00 AM del lunes 15 de marzo por la Seguridad del Estado y no pudo ver a su hijo hasta las 11:00 AM. El mismo Ricardo Galbán Casals le contó que se agravó su condición el domingo 14 de marzo debido a las condiciones infrahumanas a las que está siendo sometido.
Galbán Casals continúa la huelga que comenzó el 8 de marzo para exigir atención medica que le ha sido negada desde noviembre de 2009.
Ricardo fue aislado desde el 8 de marzo en celda de castigo sin iluminación donde tuvo que dormir en el piso y negándosele el agua durante cinco días, repitiendo así varias torturas aplicadas a Zapata Tamayo en diciembre de 2009 y enero de 2010.
“A mi hijo le negaron el agua durante cinco días... Imagínate la peste que le salía de la boca, la peste del cuerpo, los ojos por allá adentro, hundidos... [El Oficial Jefe de la Seguridad de la prisión] Rubén Fernández es el responsable de esto,” dijo Haydée.
Asimismo, Ricardo y Haydée denunciaron los preparativos que realizaban los carceleros para manipular el caso en el futuro, como ocurrió después del asesinato de Zapata Tamayo, cuando el régimen produjo grabaciones e informaciones manipuladas para negar que había causado su muerte.
“Después que se formó el corre-corre con mi hijo, que mi hijo se puso muy mal, cogieron y le pusieron bombillo, cama, colchón, luz [y] agua en esa sola celda de las 48 celdas [de castigo que existen en el penal]. Y la grabaron y la [fotografiaron]... Y mi hijo me dijo 'Cuidado, mami, no te filmen a ti,” denunció Haydée.
“[Es] lo mismo que le hicieron a Zapata, para matarlo, destruirle los órganos lentamente,” afirmó Haydée. El Directorio Democrático Cubano alerta a la comunidad internacional para que este caso no pase inadvertido como ocurrió antes de la muerte de Orlando Zapata Tamayo.
En este momento, el régimen de La Habana se ha visto forzado a brindarle atención médica al periodista independiente Guillermo Fariñas Hernández por la atención internacional que ha recibido el caso. Sin embargo, continúan las prácticas sistemáticas de tortura y represión en las cárceles del país.