LD (EFE) Helicópteros artillados tipo "Apache" han lanzado un misil contra una fábrica metalúrgica ubicada en la ciudad de Gaza. Según testigos del ataque, la explosión causada por un misil fue muy fuerte y se pudieron ver las llamas procedentes del lugar de los hechos. El cohete destruyó la empresa, a donde se dirigieron vehículos de bomberos y ambulancias en previsión de que se hubieran producido heridos.
Ese bombardeo israelí se produce horas después de que un terrorista suicida de la Yihad Islámica activara unos explosivos en una zona comercial de Tel-Aviv asesinando a nueve personas y dejando heridas a otras 65. Tras el atentado, el Ejército israelí recibió la orden del ministro de Defensa, Saúl Mofaz, de llevar a cabo operaciones contra la organización en las ciudades cisjordanas de Jenin y Naplusa.
Abú Ahmed, portavoz de Yihad Islámica en Gaza, dijo que el joven que llevó a cabo el atentado es el primero de una "unidad de mártires" recientemente formada y entrenada para atacar en distintas áreas dentro de Israel "en respuesta a la campaña de agresión israelí contra el pueblo palestino".
En la aldea de Al-Araka, cerca de Jenín, tropas israelíes detuvieron a Samir Hamad, de 51 años y padre de Sami Salim Mohamed Hamad. Los soldados arrestaron también en ese pueblo a una joven de veintidós años, Sana Sabah, tras rodear su vivienda. Los familiares de Hamad habían sacado de su casa los muebles y otras pertenencias la noche de este lunes, ante el temor de que el Ejército israelí procediera a su demolición.
Según medios de comunicación locales, el primer Ehud Olmert decidirá si tomará otras medidas contra el Gobierno de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) liderado por el grupo terroristas Hamas, que se ha negado a condenar el atentado y lo ha calificado de un "acto de defensa propia".