Tras el veto impuesto por el Gobierno a la intervención del Rey en el conflicto de Haidar, el Frente Polisario, único representante legítimo del pueblo saharaui le ha pedido al Gobierno que modifique su postura.
"Apelamos y confiamos en la comunidad internacional y sobre todo en España y EEUU. Por eso pedimos la intervención y la mediación de la Casa Real, para que aprovechando esas relaciones de entendimiento y de buenas relaciones que tiene con Marruecos puedan dar solución inmediata a esta situación, en el que está en juego la vida de una persona" ha dicho Abdulá Arabi en esRadio.
El representante polisario considera que España debe actuar, porque en una gran parte la situación de Aminatu Haidar ha sido su responsabilidad, lo que le obliga a subsanarlo: "Marruecos ha creado este problema, pero también España que le ha permitido la entrada sin reunir las condiciones para ella".
Abdulá Arabi ha señalado que existe un frente fundamental con el que presionar a Marruecos desde el Gobierno español, ahora que va a asumir la presidencia de la Unión Europea: "Tiene que ejercer todo tipo de presión, no puede decir que lo ha hecho todo" señala "Marruecos tiene intereses económicos en la Unión Europea ya que quiere ser socio de privilegios, por ahí se pueden pedirle contrapartidas, no chantajes pero sí contrapartidas de respeto a los derechos humanos" puntaliza Arabi.
Estas contrapartidas son la estrategia fundamental que señalan desde el Polisario, y tamaña tarea solo puede asumirla el Rey , porque "por muchos ministros marroquíes que paseen por España, la última palabra la tendrá siempre, siempre, el rey de Marruecos" y es precisamente nuestro monarca quien "tiene relaciones excelentes con Mohamed VI, para pedirle estas contrapartidas de respeto de los derechos humanos".
Asimismo, ha querido evidenciar que el caso de Aminatu " es la expresión máxima del fracaso de la ocupación de Marruecos en el Sáhara " ya que ha estado "34 años viviendo bajo la ocupación marroquí y no ha respetado lo fundamental, que son los derechos humanos". Por ello, Arabi concluye que: "Marruecos no puede seguir esperando ser un socio de privilegio de la UE si sigue sin respetar los derechos humanos de lso saharauis en los territorios ocupados".