Bueno, a mi tambien me daria vergüenza reconocer que 150 extranjeros derrotaron a 100.000 de mis antepasados
Ignorancia, estatalismo, la gran mentira de la Leyenda Negra...que combinación para el desastre. Lo que no se como explicarán a partir de ahora como se mezclaron las indios mesoamericanos con otras razas, o como surgieron tantas ciudades que hoy son capitales allí, o como desaparecieron imperios como el azteca y tal.. no se.
El siglo XXI viene calentito, lo mismo acabamos echando de menos al siglo XX (parece imposible, pero viendo lo que veo...)
Siempre la misma historia. Un conocido mío, Mejicano, Mexicano según él, me decía de las barbaridades que cometimos los Españoles. Le conteste que yo no sabía de que hablaba, que debieron de ser sus tatarabuelos (se apellidaba Fernandez) los que hicieron aquello, puesto que yo soy descendiente de los que se quedarón aquí, como es obvio. Pueden borrar lo que quieran de los libros, pero seguiran hablando español y seguiran teniendo apellidos españoles, quieran o no.
La noticia no tiene nada de extraño.
Es de todos bien sabido que, aunque externamente lo niegan, los actuales gobernantes mexicanos (pronúnciese la x como J), descendientes directos de los "criollos" que dinamizaron la "emancipación", en su fuero interno son unos nostálgicos amantes de la "Madre Patria". Y como han visto que en la Madre Patria se oculta y se tergiversa la Historia común para inventarse otra que les permita acomodar las actuales circunstancias opoñiticas a su ideario fantástico y fantasma. Vgr.: Cataluña, Vscongadas, Galicia,... Baleares, etc. etc. etc...
Efectivamente, muchos de los españoles que fueron allí, se mezclaron con las nativas y tuvieron descendientes, eran malas bestias (por eso conquistaban imperios centenarios) y ahí está la prueba: en algunos de sus descendientes.
No me extraña nada, es exactamente lo mismo que están haciendo otros catetos hispánicos a este lado del Atlántico.
Para los progres actuales de todas partes la Historia no es más que una pizarra en la que se puede borrar y reescribir lo que se quiera y como se quiera, siempre que la modificación corresponda a sus propios intereses, muestra indudable de su incapacidad intelectual y miseria moral.
Pudiera parecer a los menos informados que todos los males que sufrió la población indígena fueron causados, únicamente, por los conquistadores y colonizadores españoles, y que antes de nuestra llegada todo allí era maravilloso, humano y civilizado. Nada más lejos de la realidad. Los regímenes precolombinos allí vigentes eran extraordinariamente sanguinarios, crueles y despiadados con la población, eran absolutistas en términos europeos y, como en toda tiranía, eran sólo unos pocos los que disfrutaban de los privilegios.
La llegada a las Indias Occidentales de nuestros antepasados provocó un antes y un después a nivel mundial. Cierto que se cometieron abusos y crueldades por nuestra parte, pero no es menos cierto que no fueron mayores que los que ya sufrían a manos de sus propios reyes. También les exportamos enfermedades desconocidas para ellos, pero a la inversa también ocurrió, que nos trajimos enfermedades para las que no teníamos tratamientos. El nuevo orden que allí se impuso llevó grandes beneficios a la población autóctona, a nivel material, como todos los avances tecnológicos y médicos, y a nivel espiritual con la evangelización, esto muy a pesar de la inmoral progresía actual.
Sacar de la propia Historia hechos y acontecimientos tan absolutamente fundamentales para conocer la realidad no puede sino ir en perjuicio de las generaciones futuras, porque manipular la narración de lo ya ocurrido, desvirtuando la verdadera Historia, no es más que un ejercicio de incultura e irresponsabilidad intolerable. No se trata de menospreciar la ingente aportación española al Nuevo Mundo tergiversándola o silenciándola, ese no debiera ser el eje de la acción política del gobierno mejicano. El asunto que debiera guiar su acción es el conocimiento real de los hechos pasados, analizando los pros y los contras de lo ocurrido, para conocer objetivamente la trayectoria pasada y el camino a seguir en el futuro. Pero esto es mucho pedir a un progre. Espero, por el bien de los jóvenes mejicanos, que el ejemplo de los políticos de la actual España no llegue a ser imitado por sus gobernantes.
Que tengan cuidado que dicen que quién ignora su historia está condenado a repetirla.
Yo he vivido en el virreinato de la Nueva España durante varios años y les puedo decir que estos países no son mas que una especie de provincias españolas frustradas convertidas a repúblicas nacionalistas masónicas, por resumirlo brevemente de alguna manera.
Desde niños les enseñan que ellos son culturalmente descendientes de los aztecas (con lo que me extraña que sus ritos religiosos consistan en una misa católica y no en destripar indios vivos en lo alto de las pirámides, y que lo que hablen sea el español, y que no vayan con taparrabos, etc...), que los españoles (los de madre patria, ¡ja!) fueron unos señores barbados muy malos que vinieron a despertarlos de su bucólico y refinado sueño neolítico y que la palabra Méjico hay que decirla a lo largo del día y todos los días de la vida al menos unos doscientos millones de veces, para que les quede claro que no son españoles frustrados y que no vinieron unos masones y unos hacendados a quitarles la ciudadanía española y a esclavizarlos bajo el yugo de sus exclusivísimas oligarquías.
Es algo lamentable, son incapaces de sobreponer la razón a esa abducción a la que son sometidos desde niños. Son incapaces de comprender que ellos son cualquier cosa menos aztecas, mientras los mejicanos de hoy se sienten herederos de aquellos, incluso llevan en el escudo de su bandera el símbolo de la mitología fundacional azteca del águila, la serpiente y el nopal, cuando la realidad es que Méjico no es mas que el producto de la unión cultural y sanguínea de españoles y varios pueblos prehispánicos, yo diría que casi todos los de la región menos precisamente el azteca, que era el enemigo común ferozmente odiado por los demás pueblos sometidos, que se unieron a Cortés para mandar a semejante civilización de destripaindios al pozo de la historia, de la que no quedó casi nada, ni cultural ni genéticamente.
Pero no, esto que cualquiera puede comprender fácilmente aplicando una millonésima parte de sentido común y teniendo unos conocimientos de historia menos que rudimentarios, pues ellos son incapaces de reconocerlo, ellos son aztecas. Así les va, creanme, y así les seguirá yendo, quizás como castigo divino por su felonía.
Y lo mas curioso del caso es esos masones hacendados libertadores son los que desde entonces y hasta ahora dominan el país casi por completo, vamos, que el país es una tarta que se la reparten las cuatro familias de criollos, y se nota porque allí verán que entre la élite millonaria hay muy muy muy poquitos que tengan la tez oscura, son todos criollos descendientes de españoles, esos mismos que hicieron la independencia para quedarse para ellos solitos el pastel y explotar a gusto al paupérrimo pueblo mejicano.
Son paises nacionalistas, falsos, corrompidos desde sus raices, y de ahí no puede salir nada bueno. Algo así le pasaría a Cataluña y vascongadas si no es porque esos nacionalismos los tenemos dentro del propio territorio nacional peninsular y encima el resto de España es de hecho una colonia de esos cerdos nacionalistas que nos explotan sin piedad.
Y en cuanto a Felipe Calderón se le ve cada vez mas el plumero masónico, y ya la ha cagado varias veces, por ejemplo con su pésima política seguida en la crisis de Honduras, donde ha hecho todo lo contrario que le conviene a los intereses de su país, atendiendo Dios y él sabrán a que otros oscuros intereses.
Y no se hagan ilusiones, Calderón no está haciendo la guerra contra el narcotráfico por una cuestión de principios y ley, lo está haciendo o bien, como dicen allí, porque quiere favorecer a algún cártel en particular al que quiere librar de la competencia, o según me inclino yo mas bien a pensar porque el narcotráfico no tiene cabida en los planes del nuevo orden mundial, vamos, que la élite no quiere compartir poder y negocios con el narco, lo quieren todo para ellos, y eso es lo que pienso que hay.
Pues entonces a ver como les explican a los chavales por qué hablan español y no siguen realizando sacrificios humanos.
Y ya me estoy cansando que los tarados que nos gobiernan se refugien en la incompetencia cuando las burradas que hacen con pleno conocimiento de causa provocan el escándalo.
Viví varios años en un país sudamericano. Blancos, indios y negros. Lo he escrito así porque, en orden de discriminación, esa era la graduación. En un viaje de no pocas horas me tocó al lado una persona que, al saber que yo era español, no paró de zaherirme lo más que pudo. Al final, conocedor que yo era de sus discriminaciones "raciales", no pude por menos que decirle: Mire usted, señor, o desciende usted de españoles o de indios o de negros. Escoja. Y además le digo otra cosa. Los españoles que aquí vinieron no eran, que yo sepa, mis abuelos. Puede que sí sean los suyos.
A partit de ahí, el viaje fue una delicia.