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Mugabe llama a su embajadora en Australia por desvestirse en público

El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, ha hecho regresar a Harare a la embajadora en Australia, Jacqueline Zwambila, después de que supuestamente se quedara en ropa interior frente a tres hombres de la legación, informó hoy el diario oficial The Herald.

Zwambila, que pertenece a la formación del primer ministro, Morgan Tsvangirai, rival político de Mugabe aunque ambos han formado un Gobierno de unidad, "está en el país para informar" sobre el incidente presuntamente ocurrido en la Embajada hace varias semanas, según la publicación.

Fuentes próximas a Tsvangirai dijeron a Efe que dudan de las acusaciones de Mugabe a la embajadora.

Según "The Herald", la mujer se quedó en ropa interior para mostrar su enfado ante tres empleados de la Embajada, a los que acusó de filtrar información de la legación a ese mismo medio, que sigue la línea de Mugabe, al igual que el Ministerio de Exteriores.

Previamente, la embajadora había disgustado a Mugabe y a su partido, la Unión Nacional Africana de Zimbabue-Frente Patriótico (ZANU-PF), al asegurar que las sanciones internacionales impuestas al presidente y su entorno no afectan a los zimbabuenses en general.

Estados Unidos, la Unión Europea y algunos otros países mantienen sanciones sobre Mugabe, sus familiares y aliados, pero no sobre el país, y la ZANU-PF ha responsabilizado a estas medidas de los problemas de Zimbabue.

Una fuente cercana a Tsvangirai, del Movimiento para el Cambio Democrático, dijo hoy a Efe que dudan de las acusaciones de Mugabe contra Zwambila: "Creo que se trata de un nuevo caso de acoso (de la ZANU-PF) contra nosotros. El problema es que hay tres individuos contra ella". "La he visto (a Zwambila) de buen humor y de mal humor y, de mal humor, nunca se quitó la ropa", señaló la fuente, que pidió no ser identificada.

El nombramiento de embajadores ha sido una de las cuestiones que ha enfrentado a Mugabe y Tsvangirai y el primer ministro llegó a pedir a varios países que no reconocieran a los representantes diplomáticos designados unilateralmente por el presidente.

Mugabe ha nombrado embajadores sin el visto bueno de Tsvangirai, como exige el pacto político que permitió la formación del Gobierno de unidad, y, según el MDC, no ha respetado los cupos previstos de representantes de cada grupo.

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