En menos de 24 horas, diez disidentes cubanos han intentado huir de la isla y alcanzar las costas de EEUU. En el puerto La Coloma, tres de ellos han muerto en circunstancias no aclaradas. La Polícia dice que se suicidaron tras intentar en vano hacerse con el control de un barco de pasajeros. En Camagüey, siete opositores lograron secuestrar una embarcación con veinte personas a bordo.
Un barco de estudios marinos de la empresa GeoCuba, con 27 personas a bordo, se encuentra en el Canal de las Islas Bahamas, mejor conocido como "paso inocente", tras ser secuestrado en la madrugada de este miércoles en Camagüey por un comando de siete individuos armados, según fuentes cubanas. Tras amenazar con armas de fuego a la tripulación, los agresores lograron enfilar rumbo a Bahamas. Tras conocerse el incidente, las autoridades locales informaron al Servicio de Guardacostas de EEUU, destino final de los disidentes, y se ordenó el despegue de un avión de las Fuerzas Armadas Revolucionarias. El enlace de las patrullas costeras estadounidense en La Habana también envió a la zona un avión y un barco. Tres embarcaciones de las Tropas Guardafronteras cubanas siguieron a los secuestradores hasta su ingreso en aguas territoriales de las islas.
En un comunicado oficial, EEUU ha indicado que no intervendrá en el caso porque el barco porta pabellón cubano y se encuentra en una zona territorial de Bahamas. Por su parte, en un comunicado oficial las autoridades cubanas señalan que tampoco intervendrán porque "no es política del gobierno de Cuba asaltar embarcaciones secuestradas con personal a bordo en alta mar por los graves riesgos de accidentes y de pérdidas de vidas que ello entraña". Ahora, según La Habana, "corresponde a las autoridades de Bahamas o a las autoridades de EEUU, que es el destino de los secuestradores de esa nave en virtud de la Ley asesina de Ajuste Cubano, cumplir los Acuerdos Migratorios suscritos entre esos Gobiernos y Cuba, a partir de los cuales deben ser devueltos a Cuba la nave y los secuestradores".
Cuba ha acusado reiteradamente a EEUU de propiciar ese tipo de actos violentos al mantener en vigor la Ley de Ajuste Cubano, que data de 1966, que legaliza la situación de los emigrantes ilegales cubanos que llegan a territorio norteamericano tras un año de permanencia en el país. El último intento de secuestro de una lancha de pasajeros, ocurrido en la madrugada del 2 de abril, se saldó con la ejecución de tres secuestradores tras un juicio sumarísimo en Cuba. Las ejecuciones coincidieron con la campaña de represión que llevó a la cárcel a 75 disidentes condenados a penas de hasta 28 años de prisión. Ambas medidas provocaron una ola de críticas internacionales que derivaron en un aumento de la tensión en las relaciones con Washington y a la primera crisis importante con la Unión Europea.