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Soldados libaneses intervienen en Beirut para frenar un violento enfrentamiento entre suníes y chiíes

Al menos cuatro personas permanecen heridas después de los violentos enfrentamientos en el barrio de Abú Haidar, en Beirut, durante un violento enfrentamiento entre seguidores de Saad Hariri, principal líder suní, y Nabih Berri, dirigente chií. Los combates callejeros obligaron a que el Ejército interviniera. La tensión entre ambas comunidades se disparó desde el 7 de mayo tras una huelga promovida por los terroristas de Hezbolá que durante meses bloquearon la elección del nuevo presidente.

Al menos cuatro personas permanecen heridas después de los violentos enfrentamientos en el barrio de Abú Haidar, en Beirut, durante un violento enfrentamiento entre seguidores de Saad Hariri, principal líder suní, y Nabih Berri, dirigente chií. Los combates callejeros obligaron a que el Ejército interviniera. La tensión entre ambas comunidades se disparó desde el 7 de mayo tras una huelga promovida por los terroristas de Hezbolá que durante meses bloquearon la elección del nuevo presidente.
LD (EFE) Fuentes oficiales libaneses han confirmado que al menos cuatro personas han resultado heridas tras los violentos enfrentamientos entre seguidores chiíes y suníes. Los combates callejeros han tenido lugar en el barrio de Abú Haidar, en el oeste de Beirut, y finalizaron con la intervención del Ejército.
 
Según medios de prensa libaneses, tres de los cuatro heridos pertenecen a la corriente Futuro, líder de la mayoría parlamentaria libanesa, y el cuarto a Amal, grupo chií que encabeza el presidente de la Cámara, Nabih Berri.
 
La tensión entre ambas comunidades se disparó el pasado 7 de mayo tras una tensa huelga promovida por los terroristas de Hezbolá, la principal formación chiíta-libanesa, que durante meses bloqueó, junto a fuerzas cristianas, la elección de un nuevo presidente.
 
Se esperaba que la situación se calmara tras la firma de los acuerdos de Doha, en Qatar , un consenso alcanzado dos semanas después por los principales líderes musulmanes y cristianos del Líbano y que permitió la designación de un nuevo jefe de Estado. Sin embargo, meses después la violencia entre comunidades aún resurge con relativa frecuencia en diferentes áreas del país.

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