LD (EFE) En declaraciones a la emisora BBC Radio 4, Jack Straw, ministro británico de Asuntos Exteriores, cree que Irán no cumplirá con la demanda del Consejo de Seguridad de la ONU de detener su programa de enriquecimiento de uranio antes del veintiocho de abril, fecha en que la AIEA deberá presentar un informe sobre las respuestas iraníes.
Durante su visita a Arabia Saudí, Straw dijo que "trabajamos sobre la base de que Irán no cumplirá las propuestas del consejo sobre el plazo de treinta días". Por ello, vaticinó que "lo que es posible que ocurra es que la cuestión vuelva al Consejo de Seguridad y entonces habrá discusiones sobre los próximos pasos que adoptará la comunidad internacional".
En opinión del titular británico de Exteriores, de visita en Arabia Saudí, "negociar con los iraníes toma la forma de un tipo de rondó (composición musical cuyo tema se repite o insinúa varias veces), así que nunca se sabe qué va a suceder". También restó importancia a la posibilidad de un ataque militar de EEUU contra Irán, pese a que el presidente estadounidense, George Bush, no descartó esa opción si fracasa la vía diplomática.
Explicó: "Siempre he reconocido que el Gobierno de EEUU adopta una posición diferente respecto a los gobiernos europeos en este asunto teórico del uso de la fuerza. Pero en la práctica -puntualizó-, los americanos y los europeos, los rusos y los chinos están comprometidos a encontrar una solución diplomática".
El contencioso iraní se agravó la semana pasada cuando el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, anunció que su país ha conseguido completar el ciclo de producción de combustible nuclear, primer paso en el proceso de enriquecimiento de uranio. Aunque Teherán insiste en que su programa nuclear sólo persigue fines civiles, como la generación de energía eléctrica, EEUU y la Unión Europea (UE) consideran que Irán pretende desarrollar armas atómicas.