LD (EFE) Jonathan Samkange, abogado defensor de los setenta detenidos por el Gobierno de Zimbabue, ha informado de que el régimen de Robert Mugabe les acusará de los delitos de conspiración y de intento de asesinato en contra del presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema.
"Parece una broma -dijo Samkange-, la fiscalía debe de estar intentando redactar un guión de cine, en vez de (aplicando) la ley"; además, se preguntó "cómo van a tratar la cuestión de la jurisdicción con respecto a un asesinato que se cometería en otro país".
Los hombres arrestados (l64 pasajeros de un avión de carga llegado desde Sudáfrica, sus tres tripulantes y tres hombres más que les esperaban en el aeropuerto) fueron detenidos el pasado 7 de marzo, pero la Fiscalía ha aplazado una y otra vez la presentación formal de cargos ante un juez.
El Gobierno de Zimbabue ya advirtió desde el principio de que podría solicitar la pena de muerte contra los presuntos mercenarios, pero hasta este martes se había informado sólo de cargos relacionados con un intento ilegal de comprar armas y con la entrada ilegal en el país.
El aparente jefe de los detenidos, el ex miembro de las fuerzas especiales británicas Simon Mann, de la empresa británica Logo Logistics, dijo que el grupo iba a aportar seguridad para operaciones mineras en el noreste de la República Democrática del Congo. Aparte de Mann, británico con residencia en Sudáfrica, todos los detenidos en Harare tienen pasaportes sudafricanos, aunque la mayoría nació en otros países del continente y todos, o casi todos, fueron miembros del Ejército sudafricano en tiempos del "apartheid".