Según informa La Gaceta este miércoles la negociación con la banda terrorista ETA tiene un nuevo actor: el exministro y embajador de Israel, Shlomo Ben Ami, comisionado por el mediador profesional Brian Currin.
El israelí pretende que ETA haga un gesto que vaya más allá de un comunicado y que dé un balón de oxígeno al Gobierno socialista. Por ese motivo, Ben Ami se ha trasladado a Venezuela para negociar con representantes etarras. El Ejecutivo pretende con esto, según el diario de Intereconomía, dar un "golpe de impacto" a la opinión pública.
En este sentido, la maniobra deseada pasa por un desarme parcial por parte de la banda. Sin embargo, creen que esta entrega de armas no afectaría sobremanera la capacidad operativa de ETA puesto que felicitarían a los mediadores parte de su arsenal más obsoleto.
Pero a esta iniciativa de los mediadores, y por ende del Gobierno, se ha encontrado con un obstaculo: una de las actuales jefas de ETA, Irache Sorzábal, que no quiere abandonar el terrorismo.