La coalición electoral patrocinada por Batasuna continúa su intento de convertir a los presos de la organización terrorista ETA y a sus familiares en los protagonistas de las fiestas patronales que durante estos meses de verano se están celebrando y se van a celebrar en las localidades vascas y navarras.
Este jueves tocará el turno de la capital vasca, Vitoria, donde los representantes municipales de Bildu han invitado a la balconada San Miguel, en la plaza de la Virgen Blanca, para ver el chupinazo y la bajada de Celedón, actos con los que arrancan las fiestas, a varios representantes de Senideak, una asociación compuesta por familiares de terroristas etarras que cumplen condena en prisión.
Este hecho fue anunciado por la propia coalición, que también ha invitado a este acto a otros dirigentes de Bildu como el diputado general de Guipúzcoa, Martin Garitano, y el alcalde de San Sebastián, Juan Carlos Izagirre. También irán el secretario general de Eusko Alkartasuna, Peio Urizar y el portavoz de Alternatiba, Oscar Matute.
Este hecho se produce apenas dos días después de que el diputado general guipuzcoano se saltase la tradicional misa que se celebra en la basílica de Loyola para conmemorar la festividad de San Ignacio, aunque sí acudiese a Azpeitia para defender a los presos de ETA, saludar a sus familiares, y pedir el fin de la política de dispersión.
Un día después, ayer martes, el PSE reclamó al alcalde donostiarra, de Bildu, que impida dar "rienda suelta a la politización" de las celebraciones. Los ediles socialistas Denis Itxaso y Ernesto Gasco abogaron por "medir pautas de uso y de abuso" a la hora de organizar eventos y anunciaron que estarán "vigilantes para que las fiestas sean democráticas".
El principal grupo de la oposición recordó que ya se han detectado ciertas anomalías en los "cambios muy puntuales" que ha experimentado la programación para la Semana Grande de este año, que arranca el próximo día 13. En concreto, la concejalía de Cultura del Ayuntamiento decidió sustituir los conciertos de Melocos y Mala Rodríguez por los de sendos grupos con letras en euskera muy próximas a las tesis políticas de Batasuna.
Las alarmas también han saltado en otras localidades. Este mismo miércoles, en Guecho, la portavoz del PP, Marisa Arrúe, ha criticado "la presencia y el protagonismo del entorno radical" en las fiestas del barrio de Romo, a través de anuncios en el programa festivo, pancartas en la calle, conciertos y otras actividades "que no están de acuerdo en absoluto con el sentir mayoritario de nuestros vecinos y que excluyen y exceden los intereses de la mayor parte de los getxotarras".