Objetivo: cierre de filas. Después de un fin de semana en el que volvió a quedar de manifiesto la brecha interna -"No somos robots, llegó a decir Tomás Gómez-, Ferraz será escenario de su particular lunes negro con una serie de reuniones maratonianas en las que participarán las principales figuras del PSOE.
Bajo la percepción general de que la reforma de la Constitución ha separado aún más a José Luis Rodríguez Zapatero y Alfredo Pérez Rubalcaba, el PSOE reúne a su Ejecutiva Federal, a los barones territoriales del partido y al grupo parlamentario socialista, todo en una jornada víspera de que el Congreso tome en consideración la propuesta de reforma.
Según han informado a Efe fuentes de la dirección federal del PSOE, la Ejecutiva del partido se reunirá por la mañana, bajo la presidencia del jefe del Gobierno y secretario general del partido, Rodríguez Zapatero.
Previsiblemente Zapatero explicará a sus compañeros de la cúpula federal las razones por las que pidió la reforma urgente de la Constitución con el fin de introducir una disciplina presupuestaria para todas las administraciones públicas.
A las 17.00 horas del lunes, en el mismo lugar, se reunirán los secretarios regionales del partido en un encuentro en el que ya no estará presente Zapatero y que presidirá el candidato socialista para las elecciones del 20-N, Alfredo Pérez Rubalcaba.
También acudirán el vicesecretario general del PSOE, José Blanco; el secretario de Organización, Marcelino Iglesias, y la directora de la campaña electoral, Elena Valenciano.
Como colofón, a las 20.00 horas serán los parlamentarios socialistas quienes se reúnan, tras las peticiones de numerosos diputados del PSOE, que quieren un debate interno sobre la reforma constitucional antes del pleno del martes.
Las voces críticas, en público
La voz más discrepante, al menos en público, es la de Antonio Gutiérrez, ex secretario general de CCOO y diputado del PSOE por Madrid aunque no está afiliado a ese partido, que votará en contra.
Las quejas se centran ahora en la negativa del PSOE a convocar un referéndum para que los ciudadanos se pronuncien en las urnas sobre esta reforma constitucional.
El diputado del PSOE por Granada José Antonio Pérez Tapias, de la corriente Izquierda Socialista, ha apostado por el referéndum y ha argumentado que los socialistas y Rubalcaba tendrían más adhesiones si optaran por esa vía.
"Rubalcaba ha despejado la situación, pero se equivoca si no apuesta por la democracia real, en este caso el referéndum", ha escrito en su cuenta en Twitter, donde también ha dicho: "Hay que convencer a Rubalcaba de que con el referéndum ganamos todos".
No obstante, ni Blanco ni Rubalcaba se han mostrado a favor de la consulta popular, reclamada en cambio por otras fuerzas políticas como IU, BNG, ICV o UPyD.
También CiU quiere que haya un referéndum y podría utilizar esa demanda como ariete para negociar su adhesión a la reforma, dado el interés que PSOE y PP han manifestado en sumar a los nacionalistas catalanes al acuerdo.