Le quedan dos semanas como presidente del Congreso hasta la fecha de la disolución de las Cortes Y tras su decisión de no ir en las listas del PSOE su abandono del cargo de tercera institución del Estado supondrá también, o eso dice, la despedida de la primera línea de la política. De ahí, quizás, que Bono se destapara hoy protagonizando hasta cuatro 'conflictos' diferentes. El castellano manchego carga contra todos en la recta final de su mandato.
La segunda lectura de Vara
Las palabras del ex presidente de Extremadura, Guillermo Fernández-Vara en las que aseguraba que la decisión de Bono de no ir en las listas tienen "segundas lecturas, terceras y cuartas", han centrado el primer desencuentro, ya que no parecían sentarle muy bien al de Salobre: "Es un tipo excepcional, gran amigo mío y que haya hecho esa afirmación lo único que demuestra es que quiere atribuirme cualidades que no siempre demuestro, por lo tanto no tengo nada que decir...", decía en declaraciones en el pasillo del Congreso.
Cuadrado y no Camacho
Al hilo de esas palabras de Vara, Bono volvía a reafirmarse en su decisión aunque no negaba llamadas de sus compañeros al respecto: "Acabo de hablar con Rubalcaba. Mi posición es clara: no voy a dejar la política porque pienso, mientras viva, seguir en el partido socialista y con mi carnet de socialista. Pero no voy a trabajar en la primera línea de la política y no voy a presentarme a las elecciones generales. Pero esto no es algo que debería sorprenderles se lo he dicho en numerosas ocasiones..."
Sin embargo, lo relevante llegaba cuando, terminadas estas declaraciones, se retiraban los micrófonos. Bono no dejaba pasar ni unos segundos y, todavía delante de las cámaras, decía de viva voz: "Lo que me gustaría mucho es que diputados muy valiosos pudieran seguir". Y con una cámara grabando a poca distancia del corrillo, elevaba el tono: "A mí me parece que Antonio Camacho debe ser diputado socialista y Jesús Cuadrado también. ¡Pero hay 50 circunscripciones!". Explicaba el socialista la conveniencia de que el portavoz de Defensa del PSOE, Jesús Cuadrado, sea el cabeza de lista por Zamora en lugar del ministro del Interior, Antonio Camacho, quien actualmente no es diputado.
La foto de Marín
La segunda polémica, que también explicaba el propio Bono, incluye a su predecesor en el cargo, Manuel Marín, quien, al parecer, se ha negado a entregar un cuadro para colocarlo en la galería de presidentes del Congreso. En su lugar ha mandado una fotografía que Bono no tiene ninguna intención de exhibir. "Mire la fotografía también es un arte pero arriba lo que tenemos es una pinacoteca, probablemente la pinacoteca de retratos políticos más importante que hay en España. Y se me hace duro romper la tradición de que junto a un cuadro pongamos una fotografía, sin desmerecer para nada la fotografía. Y le voy a trasladar este sentimiento que es el de la Mesa al señor Marín para que lo reconsidere. Y si finalmente creyera que debe enviarnos una fotografía en vez de un cuadro, como se ha hecho desde 1810, pues yo entonces lo dejaría colocado en mi despacho para que la siguiente Mesa decida qué hacen con la foto".
"Ni media palabra" a La Gaceta
El último conflicto, más que conflicto, es batalla. El presidente de las Cortes volvía a cargar hoy contra el diario del grupo Intereconomía. Cuando el redactor de La Gaceta le preguntaba por las palabras de Vara haciendo uso del "pelillos a la mar" que Chaves había utilizado ayer para referirse a su "pique" con Bono, éste respondía así: "Pero ¿qué pelillos? Si de pelos hablásemos... ya veríamos a ver a quién le faltan más... Bueno, tengamos la fiesta en paz. Yo a usted le digo lo que quiera pero a su medio ni media palabra".