Esperanza Aguirre acudía este jueves al plató de Los Desayunos de TVE para ser entrevistada por Ana Pastor. La periodista iniciaba la ronda de preguntas abordándole por la polémica con Revilla: "Ni he hablado con él ni con su mujer", respondió la presidenta de la Comunidad de Madrid.
A la petición de Pastor de que contara su versión sobre el incidente con Revilla, Aguirre se negó. "No le voy a hacer ese favor al señor Revilla". La periodista insistió. "No es un favor, es que ha trascendido que ha tenido una bronca con su mujer". Aguirre siguió negándose. "No ha trascendido nada. Él ha dicho lo que dicho y yo digo que no es cierto".
No le bastó a Ana Pastor, que esgrimió el curriculum que les ha enviado Revilla. "Está muy dolido con su consejero". "Me parece muy bien que a usted le interese tanto lo del señor Revilla, pero creo que a los espectadores no les interesa". Pastor volvió a la carga. "No se lo hemos preguntado uno a uno, si les preguntáramos no se quién tendría razón, si usted o yo. Lo digo porque un consejero suyo dijo que se hizo famoso por lo de los taxis y las anchoas y es un representante político de nivel. ¿Está de acuerdo o no, se equivocó su consejero?". "Que no voy a comentar esto, de ninguna de las maneras. Hay temas muy importantes en España y en el mundo para que vayamos a hablar de ese tema". La encargada de Los Desayunos se lo tomó mal. "Los asuntos importantes no sólo los decide usted, también los decidimos en esta mesa".
Pastor le preguntó después por los abucheos al presidente Zapatero. "¿Dígame si le gustaron los pitos del 12 de octubre?, preguntó Ana Pastor como si nada. "Estoy en contra de todos los abucheos", dijo Aguirre. "Es verdad que los políticos tenemos que acostumbrarnos a aguantarlos. A mi me abuchean muy a menudo, también". Explicó Aguirre que lo que ha pasado este año es que para evitar los pitidos Defensa ha hecho una especie de "cordón sanitario a la redonda de las autoridades" y ha quitado las pantallas "que permitían al público seguir lo que estaba ocurriendo" y los que estaban allí decidieron decir "Zapatero dimisión" en el momento que quisieron. "Yo lo rechazo, pero a todos los políticos, muchas veces, nos hacen eso".
"Lo rechaza, pero a la vez dice que es libertad de expresión", reprochó la periodista. "Lo que digo es que los políticos estamos acostumbrados a que nos aplaudan y a que nos silben", insistió Aguirre. Pastor volvió a la carga. "Pero entonces ¿es libertad de expresión o no?". La periodista le recordó que se refería al momento del homenaje a los caídos y le preguntó "¿Eso le parece oportuno?". "Pero si ya he dicho que no, que rechazo todos los abucheos", respondió Aguirre. "Pero justifica el hecho" le espetó la periodista. "No justifico, lo explico", repitió la presidenta.
La siguiente pregunta de Pastor se refirió a que algunas personas portaron banderas preconstitucionales en el desfile y con brazos en alto. "Le pido que diga si eso debe distinguirse de la derecha democrática y si eso le hace daño al PP", preguntó la periodista vinculando a priori una cosa con otra.
"Me hace usted unas preguntas, doña Ana", fue la respuesta de Aguirre. "Ya sé que le gustaría hacérselas usted y respondérselas usted pero la mala suerte tiene que yo sea la periodista y usted sea la entrevistada. Dígame que le parecen esas imágenes", le espetó Pastor. "Pues qué me van a parecer, que las habrán buscado como locos". "Le pregunto por la imagen, y no por quién la ha buscado y lo manipulada que pueda estar", interrumpió la periodista.
"La han buscado con lupa y las habrán encontrado. Me parece muy mal, lógicamente". Insistía la periodista en vincular al franquismo con el PP como fuera. "Hay otros medios que dicen que a la derecha democrática le puede hacer daño que alguien lo mezcle, no soy yo". La presidenta de la Comunidad de Madrid se rió. "La derecha democrática está a catorce puntos por encima de la izquierda".
Luego vino el tea party. " A la izquierda, el tea party le parece una cosa terrorífica de estos americanos que están tan locos todos ellos", dijo la presidenta que a continuación pasó a explicar qué es el tea party. La periodista preguntó a Aguirre si existe un tea party en España. "Pues no, no existe", contestó Aguirre. "¿Ni política ni mediáticamente?", inquirió Pastor. "¿Es usted el tea party en España, con eso qué me dice?", interrumpió Pastor, "¿podría ser usted el referente del tea party en España?". "No hay tea party en España", repitió Aguirre.
Venezuela, Tomás Gómez y la economía consiguieron relajar la tensión. Incluso acabó en risas. "Miedo no es una expresión que le pueda acompañar" sentenció Ana Pastor.