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Ares duda que los batasunos "tengan agallas" para separarse de ETA

El consejero vasco de Interior afirmó este lunes que se está trabajando en el logro de un acuerdo antiterrorista "contundente y unitario" con los partidos democráticos y precisó que espera "altura de miras" por parte de las diferentes formaciones.

El consejero vasco de Interior afirmó este lunes que se está trabajando en el logro de un acuerdo antiterrorista "contundente y unitario" con los partidos democráticos y precisó que espera "altura de miras" por parte de las diferentes formaciones.

Rodolfo Ares reveló que el Gobierno vasco destina a combatir a ETA y a proteger a la ciudadanía "de sus actuaciones criminales" un total de 225 millones de euros anuales, cifra que supera la partida dirigida a Vivienda y que serviría para realizar cuatro hospitales como el que se pretende crear en la Margen Izquierda, el soterramiento del ferrocarril de Vitoria en dos años o el metro de San Sebastián en tres.

En el desayuno de Fórum Europa-Tribunal Euskadi, Ares afirmó que  el principal objetivo del Ejecutivo de Patxi López es "acabar con el terrorismo y consolidar la paz", procediendo a la deslegitimación de "la ideología totalitaria de ETA".

Por ello, apuntó que éste también "tiene que ser un objetivo de todos, en el que todos arrimemos el hombro" porque, en esta cuestión, no debe haber Gobierno ni oposición, "sino demócratas que trabajen juntos para conseguir acabar definitivamente con el terrorismo y consolidar la paz y la libertad".

"Desde el Gobierno vasco vamos a seguir buscando esa unidad, impulsando una política de firmeza democrática y de tolerancia cero. Al mismo tiempo, seguiremos animando al conjunto de la sociedad para que defienda valores éticos y democráticos, y muestre su rechazo y su repulsa permanente no sólo a ETA, sino a quienes les amparan y justifican", apuntó.

Aunque quiso guardar discreción sobre el posible acuerdo antiterrorista que se pretende alcanzar entre todos los partidos democráticos, subrayó que se está intentando ese consenso "para fijar una posición muy clara, contundente y unitaria en relación con el terrorismo". Por ello, mostró su esperanza en que todos tengan "la altura de miras y la responsabilidad necesaria para conseguirlo".

Además, expresó su deseo de que todos sean capaces de decir "juntos a ETA que no va a conseguir ninguno de sus objetivos ni por mantener la violencia ni por dejarla, y que el único camino que le queda es dejar definitivamente la actividad terrorista".

Rodolfo Ares abogó porque se le envíen a ETA y a su mundo "mensajes unitarios", porque sólo lograrán "sembrar dolor y muerte", y seguir "acumulando presos". "Si lo hacemos todos juntos, será el mejor camino para que se abra un reflexión en ese mundo que les lleva a dejar la actividad terrorista", dijo, para comprometerse a dedicar todos sus esfuerzos para conseguir la unidad de los demócratas.

"ETA no está más fuerte después de sus últimos atentados, sino mucho más débil. No tiene más apoyos que antes, tiene muchos menos. No ha avanzado en uno solo de sus objetivos totalitarios porque la democracia y las instituciones no se rinden. Si los terroristas pensaban desanimarnos con sus últimas acciones criminales, han conseguido justo lo contrario: más detenciones, más desmantelamiento de sus infraestructuras, más aislamiento social y político", destacó.

En su discurso, el titular de Interior manifestó que la banda armada "está viviendo el final de su existencia, y el Gobierno vasco, en estrecha colaboración con el Gobierno de España, va a hacer, está haciendo ya, los máximos esfuerzos para acelerar su final".

Carteles y fotos de presos

Según indicó, para combatir también a "aquellos que amparan y justifican" la violencia, el Ejecutivo "ha emprendido una lucha sin cuartel para impedir las manifestaciones que sean convocadas para defender los postulados de ETA, así como para eliminar las pancartas, pintadas, carteles y fotos de presos que tengan como objetivo exaltar a miembros o acciones de la organización terrorista".

En esta línea, emplazó a no dejarse engañar porque, "quienes colocan fotografías de presos, lo hacen con la intención de homenajear a los terroristas que han cometido esos horrendos crímenes". "Nuestros espacios públicos tienen que ser espacios de paz, de normalidad y de convivencia democrática, y no laboratorios de coacción terrorista y violencia desestabilizadora", precisó.

Según aseguró, "una sociedad democrática no puede permitir que las caras de fanáticos asesinos totalitarios sean exhibidas impunemente para rendirles homenaje". "¿Acaso se imaginan ustedes hoy las calles de Berlín empapeladas con retratos de los criminales nazis?", preguntó.

En esta línea, afirmó que "la Ertzaintza no puede hacer la vista gorda y no perseguir el delito, para no enfadar a los intolerantes y fascistas que amparan la violencia". "No pueden pedirnos que no actuemos para no excitar a la bestia y que se enfade, y se provoquen altercados en el enfrentamiento con la Policía", enfatizó.

De esta forma, destacó que el Gobierno vasco, el Departamento de Interior y la Ertzaintza "seguirán cumpliendo con su obligación, trabajar sin descanso para defender la libertad y consolidar la legalidad y la convivencia pacífica en Euskadi". "Y lo vamos a hacer sin titubeos de ningún tipo, desde el absoluto convencimiento de que esta batalla la vamos a ganar", reiteró.

PNV

A su juicio, el PNV debe entender "que la política de tolerancia cero" con los actos que ensalzan a los terroristas o la retirada de carteles, pancartas y pintadas que vulneran la Ley y ofenden la memoria de la víctimas, "no tiene como objetivo afear comportamientos de Gobiernos del pasado", sino "avanzar en una política de pedagogía democrática y de combate a ETA y al mundo radical en todos los frentes para cumplir la Ley y las disposiciones judiciales".

Con el fin de cumplir este objetivo, anunció que en los próximos días firmará un acuerdo con Eudel sobre esta materia, que calificó de "importante y positivo".

Por ello, aclaró que "la política de tolerancia cero contra el entorno de ETA en las calles y plazas de pueblos y ciudades" de Euskadi seguirá adelante, "orientada a un objetivo estratégico final: cortar de raíz el relevo generacional en ETA".

"Nos provocarán una y mil veces. Tratarán de enturbiar las fiestas de nuestros pueblos y ciudades. Los amigos de ETA intentarán reponer las fotos de los terroristas. Cada vez que lo hagan, los volveremos a retirar. No nos cansaremos de retirar soportes que hagan apología del terrorismo, u homenajes a terroristas", señaló.

Tras advertir a "esa minoría de jóvenes vascos que actúan en la vía pública como meritorios de ETA", de que, "si participan en la estrategia terrorista de socialización del sufrimiento, deberán, ellos mismos, socializar las responsabilidades por el sufrimiento causado", subrayó que el objetivo es "trabajar sin descanso para conseguir que a ETA le sea cada vez más difícil incorporar gente a sus filas".

225 millones anuales

En este sentido, destacó "un dato esclarecedor": que el Gobierno vasco destina un total de 225 millones de euros anuales a combatir a ETA y a proteger a la ciudadanía de sus acciones criminales, superando el montante que se destina a Vivienda.

"Esta cantidad de dinero bastaría para hacer cada año cuatro hospitales como el que se va a empezar en la Margen Derecha, o daría para pagar en dos años el soterramiento del ferrocarril en Vitoria, o para pagar en menos de tres años el futuro metro de San Sebastián", añadió.

Rodolfo Ares aseguró que el Ejecutivo seguirá invirtiendo "todos los recursos que sean necesarios" para proteger la vida y la seguridad de las personas, pero consideró "conveniente que toda la ciudadanía sepa que ETA representa un freno" para el desarrollo económico y el progreso".  

Preguntado por si tiene constancia de la posible vinculación de ETA y el narcotráfico sudamericano, afirmó que no tiene ninguna información al respecto, "pero es posible".

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