Vehemente, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha reclamado elecciones anticipadas lo antes posible; extremo que se ha convertido en el grito de guerra de la convención municipal del PP, que se ha celebrado en Toledo. "Que llamen a las urnas y dejen de hacer tanto daño a la gente", dijo contundente, levantando a un abarrotado auditorio.
Para la regidora, el PSOE "tuvo su oportunidad y ha fracaso" y ahora está en el sucesor de José Luis Rodríguez Zapatero, ya sea "Rubalcaba, un desconocido u otro más desconocido".
"El PSOE se cae a pedazos", exclamó Barberá, para afirmar a renglón seguido que ahora se dedican "a insultar y a vejar". En esta línea, pero en decibelios mucho más reducidos, Alberto Ruiz Gallardón dijo que la marca PP es la mejor contra la crisis económica, y puso como ejemplo la gestión que hace desde el Ayuntamiento madrileño.
Todos los alcaldes del PP firmaron, ante la atenta mirada de Mariano Rajoy, un manifiesto en pro de la austeridad y en la que rechazan la corrupción, principalmente en el marco urbanístico.