L D (EFE) Según Cándido Conde Pumpido, "debemos entender en qué situaciones se encuentran los extorsionados por la banda armada", en alusión a acusaciones que han aparecido de "colaboracionistas", de Martín Berasategui, Pedro Subijana, Karlos Arguiñano y de Juan Mari Arzak.
El fiscal general del Estado confía en la profesionalidad del juez que lleva el caso, Fernando Andreu, del que dijo "tiene mucha experiencia en terrorismo y en el País Vasco, y por ello conoce de buena mano cómo afecta el chantaje de ETA a los ciudadanos".
Después de que el etarra José Luis Beotegui, detenido hace una semana, declarara que los dos cocineros vascos habían pagado a ETA seis millones de pesetas cada uno tras ser extorsionados por la banda terrorista, el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha decidido citar a Juan María Arzak y Pedro Subijana en calidad de imputados por un supuesto delito de colaboración con ETA. El objetivo de la citación es que aclaren si cedieron al chantaje terrorista.
Los dos cocineros han sido citados para el próximo lunes. Ese día, y en calidad de cuando, Arzak y Subijana deben acudir a la Audiencia Nacional en compañía de sus abogados para responder ante un supuesto delito de colaboración por allegar fondos a ETA.
El magistrado podría citar como testigos a otros dos cocineros a los que el etarra Beotegi hizo referencia en su declaración. Se trata de Carlos Arguiñano y Martín Berasategi. El terrorista detenido no ha concretado si estos dos restauradores llegaron a pagar la extorsión aunque sí ha confirmado que recibieron una carta exigiéndoles el pago a ETA dentro de su campaña de chantaje terrorista.
El etarra explicó que Arzak se dirigió a él en su nombre y en el de Subijana para que gestionara una reducción en la cantidad exigida. El acuerdo alcanzado consistió, siempre según la declaración del etarra, en que los dos cocineros hicieran un primer pago de seis millones de pesetas y completaran el resto, hasta doce millones, a razón de un millón por año.
Beotegi, que tiene un vínculo familiar con la mujer de Juan María Arzak, fue detenido el pasado día 7 en la localidad vizcaína de Miravalles e ingresó este lunes en prisión incondicional acusado de pertenencia a ETA.