De este señor, se espera cualquier cosa. No es que el centro derecha andaluz ataque sus posiciones, que es y sería normal. La verdad es que su comportamiento fue muy criticado en el seno de Comisiones Obreras de Sevilla cuando la dirigió hace años y que en Izquierda Unida, su figura se está atragantando debido a que obstaculiza su leve crecimiento electoral. Ahora, tras mentir sobre dónde tuvo lugar la mariscada, que fue en un restaurante de lujo de Bruselas, se niega a dar explicaciones sobre una mariscada, si fue o no pagada con dinero público o con tarjeta de Mercasevilla, si fue la única o hubo más y a cuánto ascendió, en concreto, el coste de la que apareció en la ya famosa foto que publicó ABC y que, indudablemente, fue filtrada al medio de Vocento por uno de sus "amigos". A preguntas del PP sobre este asunto en el Pleno Extraordinario, Torrijos dijo que "ya veremos cómo y cuándo respondo" y acusó a los medios de que "con esta foto y una campaña como esta contra mí lo que se intenta es influir en la Justicia contando lo que haga falta con pruebas o sin ellas". Viñeta de ROPO
La mentira sobre dónde fue la mariscada
Hace unos días, Torrijos aseguró que la mariscada tuvo lugar en la European Seafood Exposition y llegó a insinuar que su comportamiento era el comportamiento habitual de un cargo público que visita una feria de ese tipo. Pero ABC precisa hoy que la famosa foto está tomada el 22 de abril de 2008, el mismo día que la comitiva de Mercasevilla llegó a Bruselas. Pero ese día, a la hora de comer, tras una visita turística, Torrijos y sus acompañantes se encaminaron a la Rue des Bouchers, la calle en la que están los restaurantes más lujosos de la capital belga. Fueron 7 los que quedaron al final tras la marcha de algunos que tenían que trabajar en la Exposición y 7 fueron los comensales de la mariscada. El nombre del restaurante es La Bergerie - Mare Nostrum. Torrijos dice haber comido los mariscos en la propia Exposición pero el recinto estaba a 7,4 kilómetros de distancia. O sea, Torrijos no ha dicho la verdad.
Los comensales fueron cinco miembros de la cúpula directiva de Mercasevilla en aquella fecha y dos mayoristas de pescados. Los miembros de Mercasevilla fueron: Fernando Mellet y Daniel Ponce —los dos máximos directivos y hoy principales imputados del caso de corrupción—, Regla Pereira —secretaria de dirección ahora también imputada—, Juan Carlos Recio —actual gerente— y Antonio Rodrigo Torrijos —vicepresidente de la compañía— por parte de la lonja pública; José María Morillo y Antonio Vela en el lado de la asociación de mayoristas.
Tras la gran comilona, ni siquiera fueron a visitar la feria, motivo del gasto de dinero público que viajar a Bruselas tan amplia comitiva. Se subieron al furgón alquilado y se fueron a Brujas, donde habían reservado las habitaciones, concretamente en el hotel NH. El resto del viaje consistió en acudir dos horas al recinto ferial el miércoles 23 de abril al mediodía, vuelta a Brujas para pasear por uno de sus canales en barca y desplazamiento a Gante para conocer la ciudad y cenar en el restaurante Brasserie Pakhuis, especializado en ostras, otro ágape que costó 539,50 euros. En esa ocasión pagó el mayorista José María Morillo. Y también hay fotos. De esa comida, por cierto, también existen fotos, recalca ABC.
Los papeles del pago de la mariscada desaparecen
Ahora, el problema está en saber quién pagó. Los de Mercasevilla dicen que pagaron los mayoristas, pero estos lo niegan, porque sólo eran dos frente a cinco de la lonja sevillana. Fernando Mellet dice que no puede dar más información y no hay documentación en Mercasevilla sobre este asunto.
Precisamente Torrijos se ampara en la falta de papeles. Ayer, ante las preguntas del PP sobre este asunto en el Pleno Extraordinario, reiteró que «ya veremos cómo y cuándo respondo», para no dar explicaciones, e incluso acusó a los medios de que «con esta foto y una campaña como ésta contra mí lo que se intenta es influir en la Justicia contando lo que haga falta con pruebas o sin ellas». Recuerda, además, que la foto se hizo «hace la friolera de dos años y siete meses» y que «la publican como si fuera de ayer». Pero fue él mismo quien la publicó en su blog precisamente hace unos días. Hace dos años y siete meses se estaban presentando unas cuentas a favor, con reparto de dividendos, que la auditoría que maneja el juzgado considera falsas.