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DESMONTADA LA TRAMA DE ESPIONAJE

Prada confirmó los datos de unos partes que se han demostrado falsos

El Mundo ha demostrado que los partes difundidos por El País para probar la hipotética trama de espías en Madrid son falsos o erróneos. Se demuestra así, como sostenía Aguirre, que todo era un montaje. Desde Génova sí le dieron pábulo. Prada había ratificado los datos que contenían sobre él.

(Libertad Digital) Este domingo El Mundo, con un artículo de Luis Ángel Sanz, termina de desmontar la supuesta trama de espionaje en la Comunidad de Madrid, que ya se estaba revelando como falsa en la comisión de investigación. El diario demuestra, analizándolos uno a uno, y con pruebas, que los partes son directamente falsos, contienen errores de bulto o son absolutamente irrelevantes.

El País aireó nueve partes sin membrete que supuestamente iban a demostrar que en la Comunidad de Madrid existía una trama de espionaje. Entre las víctimas de los espías, Alfredo Prada o Manuel Cobo. Las exclusivas del diario de Prisa desataron inmediatas reacciones en todas las esferas políticas y también la del PP, que emitió un comunicado anunciando una investigación interna y calificando los hechos conocidos como "gravísimos". Esperanza Aguirre siempre sostuvo que todo era un montaje. Lo que se publica este domingo El Mundo viene a darle la razón.

Según el diario de Pedro J., tres de los partes, dos de ellos sobre Alfredo Prada y otro sobre la diputada regional Carmen Rodríguez Flores son directamente falsos. Con los datos de que dispone apunta a que se hicieron a posteriori.

Por ejemplo, uno fechado en el día 13 de abril sitúa a Prada en el Parador Nacional de Chinchón, desde las 12,20 horas hasta las 18,15. Las pruebas documentales de las que dispone El Mundo sitúan a Prada no en la localidad madrileña, sino en León.

Otro parte, fechado el 16 de abril, situaba a Prada en el hotel Intercontinental "a primera hora". Su agenda y la nota de prensa emitida por la Comunidad indican que estuvo en el edificio donde trabaja firmando un convenio con el Club de Madrid y después asistió al hotel NH Parque Avenidas. No fue hasta las 13.30 horas cuando llegó al Intercontinental, pero los espías dicen que abandonó el edificio a las 13.40. El acto al que asistía no terminó hasta las 14.30. Así lo atestiguan las fotos oficiales.

No es la única mentira en el parte: cuentan que estuvo de 14.30 a 20.30 horas en un restaurante de la madrileña calle Martínez Campos. Tras su salida, explican que le perdieron y le buscaron durante dos horas en el trabajo, en su casa y hasta en el estadio Vicente Calderón. En realidad, a las 20 horas Prada estaba en la sede de la Comunidad entregando el I Premio de Arbitraje Internacional.

Se da la circunstancia de que el ex consejero Alfredo Prada ratificó en su día "punto por punto" que lo publicado por El País coincidía con su agenda y así se lo dijo también a El Mundo. No hizo lo mismo la parlamentaria Carmen Rodríguez Flores. En el informe que le atañía a ella, la situaban en un restaurante donde ella dijo que nunca estuvo.

Errores absurdos

Otros tres partes incluyen errores que rayan el absurdo. En uno de ellos informan de un seguimiento a Prada infructuoso. Tras comprobar que el coche oficial se va de la Consejería sólo con el conductor, esperan pacientemente, durante varias horas, a que salga el consejero. A esa hora, un jueves por la tarde, Prada estaba en el pleno de la Asamblea de Madrid como todas las semanas a la misma hora. En otro, buscan al consejero un sábado a las 22.45 en la Consejería. Lógicamente no estaba.

Finalmente, varios partes sobre Manuel Cobo son absolutamente irrelevantes. Uno de ellos explica detalladamente la hora en que sale de casa y a la que llega a su lugar de trabajo. Cuentan, además, el hecho lógico de que le "acompañan una moto de dos ocupantes de avanzada y un vehículo con un ocupante por detrás, realizando la contravigilancia". O explican, en otro, que Cobo fue a Génova un día en que había Comité Ejecutivo Regional y los periodistas también captaron la imagen.

La valoración del PP de Madrid

La única reacción del PP, por el momento, ha llegado del partido en Madrid. El portavoz popular en la Asamblea de Madrid, David Pérez, declaró que las acusaciones de espionaje se "desmontan" al quedar demostrada la "falsedad" de los partes de seguimiento. Y se preguntó "quién reparará ahora el nombre del PP y de su Gobierno en la Comunidad de Madrid".

"Al quedar demostrada la falsedad de los partes de seguimiento se desmonta definitivamente toda la acusación de espionaje", defendió el portavoz para preguntar "quién va a pedir disculpas a personas que, como el señor Peña o el señor Castaño, llevan 30 años de servicio y de la noche a la mañana han visto cuestionada su actuación con acusaciones gravísimas".

"¿Rectificará el PSOE y quienes dieron crédito a estas acusaciones sin fundamento para atacar a Esperanza Aguirre? Alguien tendrá que responder de la falsedad de los supuestos partes de seguimiento, que desmonta definitivamente toda la acusación contra el Gobierno del PP", consideró después de asegurar que "no queda base alguna para esas acusaciones".

Con la "falsedad" de los partes "se han caído todas las patas de la historia", afirmó David Pérez, que subrayó que el asesor de Seguridad de la Consejería de Presidencia, Justicia e Interior, Marcos Peña, "ha resultado que ni siquiera estaba en la Comunidad cuando se le atribuían los espionajes". Aludía a lo que dijo en su comparecencia en la comisión de investigación.

 

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