La crisis entre Génova y el Partido Popular de Asturias se recrudece. Según ha podido saber Libertad Digital, Mariano Rajoy quiere zanjar "lo antes posible" la candidatura por el Principado, y sigue apostando "ahora más que nunca" por Francisco Álvarez Cascos. Sin embargo, la dirección regional de la formación se resiste y amenaza con "una revolución".
El trabajo de despacho se intensificaba en los últimos días. Que Rajoy se había decantado por Cascos lo desvelaba este diario el pasado veintinueve de agosto, pero ahora conocemos nuevos detalles de la operación. Según la agencia EFE, el único requisito puesto al ex ministro es que le garantice unos "mínimos acuerdos" con los barones del PP asturiano y, en especial, con el actual presidente, Ovidio Sánchez.
"Plantear la posibilidad de que pueda cambiar su postura por un cargo es miserable e indignante", contestaron a las pocas horas desde la dirección regional. Traducido: advierten a Génova que de "imponer" la candidatura de Cascos podrían incluso "desvincularse de Madrid".
Un miembro de la dirección nacional del PP reconoce la situación de crisis: "es un escenario complicado" porque "recibimos multitud de mensajes contradictorios", a lo que hay que sumar que Ovidio Sánchez "no ha ofrecido un candidato de consenso" sino "varios" que, en muchos casos, no cumplen con las expectativas.
Por todo ello, insisten las fuentes consultadas por Libertad Digital, la decisión ya está tomada, si bien ahora "es necesario encajar las piezas del puzzle". No hay dirigente del partido, desde María Dolores de Cospedal hasta el propio Rajoy, que no diga que Cascos es "un extraordinario político".
En este sentido, cabe recordar que existen sondeos que dan la victoria al PP con el ex ministro como cabeza de cartel, lo que le hace "una apuesta segura". Convencer a los líderes, que no a las bases, de los populares asturianos es, pues, la principal prioridad de la vicesecretaria de Organización, Ana Mato.
Tan altos estaban los sables el lunes, que este martes la tensión ha bajado un decibelio. A primera hora, la secretaria general del PP advertía: "hay que centrarse en dejar las discusiones personalistas un poco al margen".
El alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, acataba, sólo en parte: "la dirección nacional todavía no ha dicho nada que yo sepa. Nos ha mandado esperar. Somos gente disciplinada y esperamos, pero esperar no quiere decir que uno vaya a cambiar de criterio", apuntó. Eso sí, advirtió que "esperar no quiere decir cambiar de criterio".
De Lorenzo explicó la situación, desde su perspectiva: el PP de Asturias ha descartado cualquier posibilidad de pactar con Álvarez para que éste lidere la candidatura y está a la espera de que desde Madrid se autorice la convocatoria del comité electoral regional para designar candidato "y luego la dirección nacional tendrá la última palabra".
Según las fuentes consultadas del aparato del partido a nivel nacional, el objetivo es cerrar el capítulo de la candidatura asturiana antes de que finalice el mes de noviembre, fecha tope que también se dan para Navarra, donde todavía siguen sin cabeza de cartel para las elecciones de 2011.