L D (EFE) Después de que el pleno del Congreso no convalidara este jueves las modificaciones introducidas por el Senado porque las ausencias de diputados impidieron conseguir la mayoría absoluta necesaria, el PP anunció que aprobará estas mismas enmiendas en la Ley de Cooperación con la Corte Penal que actualmente tramita la Cámara Alta. El PSOE, que se opuso a la mayoría de las enmiendas incorporadas por PP y CiU en la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, entiende que este arreglo constituye una "chapuza sobre chapuza", porque la Corte Penal Internacional merece un "tratamiento singular" y no "que la llenen de retales mal cosidos", según Martínez.
Las enmiendas rechazadas, entre otras cuestiones, establecían la obligatoriedad de los sospechosos de delitos graves a someterse a la prueba de ADN, extendían la aplicación de los juicios rápidos a delitos de daños, de venta callejera de droga y de piratería intelectual, y permitían mecanismos de alerta para evitar la excarcelación de presos por el cumplimiento de la duración máxima de la prisión preventiva sin haber sido juzgados.
La senadora socialista ha dicho que se alegra de que las enmiendas no fueran avaladas por el Congreso, puesto que el PSOE había presentado en el Senado un veto a la reforma. Martínez ha añadido que ahora se abre una "segunda oportunidad" para discutir esta iniciativa "desde cero". Su propuesta es tramitarla de nuevo con los preceptivos informes del Consejo General del Poder Judicial y del Consejo de Estado, y discutirla con el "sosiego" que, a su juicio, exige la modificación de una figura tan importante como la prisión preventiva.
María Antonia Martínez, ponente de esta reforma en el Senado, ha dicho que el PP había introducido estas modificaciones, que también afectan a los juicios rápidos, de forma directa en la Cámara Alta en el trámite de enmiendas, lo que a su entender no permitió discutirlas en tiempo y forma. En este sentido, ha atribuido las "prisas" del grupo popular por aprobar estas medidas a la necesidad del Gobierno de dar una respuesta "mediática" e inmediata a casos que han conmovido a la opinión pública, como el esclarecimiento de las muertes de las jóvenes malagueñas Sonia Carabantes y Rocío Wanninkhof.
Las enmiendas rechazadas, entre otras cuestiones, establecían la obligatoriedad de los sospechosos de delitos graves a someterse a la prueba de ADN, extendían la aplicación de los juicios rápidos a delitos de daños, de venta callejera de droga y de piratería intelectual, y permitían mecanismos de alerta para evitar la excarcelación de presos por el cumplimiento de la duración máxima de la prisión preventiva sin haber sido juzgados.
La senadora socialista ha dicho que se alegra de que las enmiendas no fueran avaladas por el Congreso, puesto que el PSOE había presentado en el Senado un veto a la reforma. Martínez ha añadido que ahora se abre una "segunda oportunidad" para discutir esta iniciativa "desde cero". Su propuesta es tramitarla de nuevo con los preceptivos informes del Consejo General del Poder Judicial y del Consejo de Estado, y discutirla con el "sosiego" que, a su juicio, exige la modificación de una figura tan importante como la prisión preventiva.
María Antonia Martínez, ponente de esta reforma en el Senado, ha dicho que el PP había introducido estas modificaciones, que también afectan a los juicios rápidos, de forma directa en la Cámara Alta en el trámite de enmiendas, lo que a su entender no permitió discutirlas en tiempo y forma. En este sentido, ha atribuido las "prisas" del grupo popular por aprobar estas medidas a la necesidad del Gobierno de dar una respuesta "mediática" e inmediata a casos que han conmovido a la opinión pública, como el esclarecimiento de las muertes de las jóvenes malagueñas Sonia Carabantes y Rocío Wanninkhof.