Los socialistas responden así a las críticas abiertas del PP y el presidente murciano Ramón Luis Valcárcel sobre el clima político de la región, que ha culminado en la terrible agresión al consejero.
El consejero agredido identificó esta semana a dos socialistas como "corresponsables" de la agresión. Begoña García Retegui y María González Veracruz, que emitieron repetidamente acusaciones falsas sobre su persona, algunas sobre su vinculación familiar con Valcárcel. No obstante, fue Veracruz la que resultó ser hija del delegado del Gobierno en Murcia.
La Policía ha investigado las protestas que se llevan produciendo desde las últimas semanas, como las desarrolladas en las sedes del PP y frente a los domicilios privados de los propios dirigentes populares.
Según El Mundo, el secretario general del PSOE de Murcia, Pedro Saura, considera en su comunicado que su formación no tiene nada que ver con esto. La versión oficial de los socialistas murcianos considera, de hecho, que la agresión es un delito que no tiene nada que ver con la condición de consejero de Pedro Alberto Cruz. "La historia dirá que hubo una agresión condenable a un consejero, probablemente privada, y un presidente de la autonomía engañó a los murcianos y no tuvo escrúpulos en mentir a todos".
Es más, según el diario, Saura aprovecha para volver a azuzar la precampaña y se niega a sacrificar un ápice de las escasas expectativas electorales de los socialistas de la comunidad. El comunicado finaliza por eso arremetiendo contra Valcárcel por "criminalizar a una parte de la sociedad murciana: la izquierda".
Estas afirmaciones coinciden con las de la candidata socialista a la comunidad, Begoña García Retegui, que acusó al gobierno de Valcárcel de "desviar la atención" de los problemas económicos que atraviesa la región, "haciendo parecer" que la paliza "es un problema entre partidos" utilizada por el PP para acallar las protestas.
Los populares prefirieron esperar a la aprobación de una declaración institucional de condena de la agresión para responder a estas acusaciones de Retegui. María Pedro Reverte, portavoz del gobierno de Valcárcel, aseguró que nadie iba a "amedrentar" a los populares murcianos y expresó su "repulsa" a quienes recurren tanto al "insulto" como a la "fuerza".