Menú

El registro de Garzón avala la tesis de los tres peritos mientras que sus abogados recurren la imputación

El magistrado tuvo cerca de 30 horas a su disposición a uno de los tres peritos que realizaron el informe que relacionaba a ETA con uno de los imputados del 11-M. Precisamente al que asumió la autoría del análisis. Como a los otros dos, le había citado en calidad de testigo y salió de la Audiencia imputado. Según desvela El Mundo, Garzón no consiguió el objetivo buscado al ordenar el registro en las dependencias de la Policía Científica: encontrar pruebas que avalaran la imputación por "falsedad en documento oficial". Por el contrario, ese registro exculpó a los tres agentes e incriminó a sus superiores. Los abogados de los peritos y el sindicato Manos Limpias han recurrido el auto de Garzón.  

El magistrado tuvo cerca de 30 horas a su disposición a uno de los tres peritos que realizaron el informe que relacionaba a ETA con uno de los imputados del 11-M. Precisamente al que asumió la autoría del análisis. Como a los otros dos, le había citado en calidad de testigo y salió de la Audiencia imputado. Según desvela El Mundo, Garzón no consiguió el objetivo buscado al ordenar el registro en las dependencias de la Policía Científica: encontrar pruebas que avalaran la imputación por "falsedad en documento oficial". Por el contrario, ese registro exculpó a los tres agentes e incriminó a sus superiores. Los abogados de los peritos y el sindicato Manos Limpias han recurrido el auto de Garzón.  

(Libertad Digital) Ese registro se practicó el pasado viernes a las tres de la tarde y se prolongó hasta las once y media de la noche. El Mundo detalla este lunes que lo incautado avala "punto por punto las tesis de los peritos que realizaron el informe que relaciona a la banda terrorista ETA con uno de los principales imputados del 11-M". Lo llevaron a cabo dos inspectores de la Unidad Central de Inteligencia expertos en informática, otros dos agentes vigilaron la puerta de entrada a la oficina en la que los tres peritos tienen sus ordenadores y archivos y otros dos funcionarios ayudaron a la secretaria judicial.

El objetivo del juez era encontrar pruebas que avalaran la imputación por falsedad en documento oficial. Apunta el diario que con este registro, Garzón pretendía "desbaratar los argumentos de Manuel Escribano, el perito que asumió la autoría del análisis sobre la sustancia encontrada en el domicilio de Hasan Haski, que se llevó a cabo en el laboratorio de la Unidad de Análisis de la Policía Científica el 21 de marzo de 2005".
 
Sin embargo, la actuación policial en las dependencias de la Policía Científica, en la que estuvo presente el propio Escribano tomando notas con "su habitual minuciosidad", dejó el resultado contrario para el juez porque exculpa a los tres peritos e incrimina a sus superiores.
 
En ese registro los agentes encontraron grabado en un disquete de ordenador el informe 48-Q3-05, que determinó que la sustancia encontrada a Haski era ácido bórico. Es "exactamente igual al original que se entregó, en copia de papel y firmado por los tres peritos, a su jefe, Francisco Ramírez, el día 21 de marzo de 2005". Y también es el mismo que los tres peritos entregaron el pasado 11 de julio al jefe de la Unidad de Análisis, José Andradas, después de constatar que el primero había sido sustituido por otro falso firmado por el jefe de sección Francisco Ramírez.
 
Las presiones del jefe de los peritos
 
En el registro los agentes también encontraron un cuaderno manuscrito de Escribano donde el perito anota todos sus análisis. Ahí no sólo estaba consignado el informe manipulado por Ramírez sino que aparecen reflejadas las presiones que el perito recibió de sus superiores para que cambiara el texto. Detalla El Mundo que "en la misma hoja del cuaderno donde se reseña el informe, también escrito a mano, se hace constar que el día 22 de marzo de 2005 Ramírez pretendió que se modificaran las observaciones del informe pericial. Asimismo, Escribano apuntó que el día 24 de marzo (dos días después de la fecha que figura en el informe falso remitido al juez Del Olmo por Ramírez) el jefe de sección de la Unidad de Análisis volvió a insistir en su petición de que se retirasen las observaciones que vinculan al imputado por el atentado del 11-M con ETA".
 
Recuerda el diario que Escribano ha llevado a cabo cerca de 1.000 informes de explosivos en sus casi 18 años como facultativo de la Policía Científica y que hasta ahora "ninguno de sus informes había sido sometido a revisión o modificación por sus jefes. El primero ha sido justamente el que relaciona al 11-M con ETA".
 
Y concluye la noticia que firma Casimiro García Abadillo que "el tercer y definitivo dato que respalda la tesis de los peritos -es decir, que fueron su jefe, el señor Ramírez, y sus superiores los responsables de un delito de falsedad en documento público, y no ellos- es el libro de registro del laboratorio de la Unidad de Análisis". Es aquí donde consta que fue Escribano y no Ramírez el encargado de hacer los análisis sobre la sustancia encontrada en el domicilio de Hasan Haski.
 
El trato del juez a Escribano y su sarcasmos
 
Durante las cerca de 30 horas que Garzón tuvo a su disposición a Escribano, el juez "trató de forma muy dura" al perito. Según El Mundo, "en repetidas ocasiones le dijo que no le gritara (el perito tiene un elevado tono de voz, pero nunca le gritó) e incluso le advirtió de que no se riera de él, cosa que en ningún caso hizo el facultativo".
 
Antes había comparecido la también perito Isabel López, "quien, fruto de la presión a la que fue sometida, se echó a llorar delante del juez. Cuando la perito le mostró unos documentos que demostraban que las observaciones que interrelacionan sustancias son muy comunes en los informes periciales, Garzón le dijo en tono sarcástico que algunos de esos papeles se iban a ver pronto publicados en El Mundo".

Temas

En España

    0
    comentarios