L D (Europa Press) El citado tribunal precisa también que, tanto el Abogado del Estado como el Fiscal han manifestado que no hay "caso alguno de responsabilidad contable". Este auto ha sido emitido en respuesta a la denuncia presentada por el coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares el 5 de noviembre de 2007. Tras la citada denuncia, la sección de Enjuiciamiento del Tribunal de Cuentas abrió pieza para oír al Abogado del Estado y al Ministerio Fiscal.
Ambos interesaron la "no incoación" de procedimiento al considerar que "los hechos investigados habían quedado suficientemente justificados en la documentación obrante en las actuaciones previas".
Por ello, el tribunal ha declarado que no había lugar a la incoación del proceso judicial contable que había denunciado Llamazares, en relación con las campañas de publicidad de Eduardo Zaplana en el Ministerio de Trabajo. La citada Sección de Enjuiciamiento precisa que no incoa el proceso por "resultar de las actuaciones previas de modo manifiesto e inequívoco la no existencia de caso alguno de responsabilidad contable".
Gaspar Llamazares había denunciado con anterioridad, en dos ocasiones, ante la Fiscalía Anticorrupción, las citadas campañas publicitarias durante el año 2003. Pero estas denuncias fueron archivadas. Con posterioridad, el entonces ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, pidió que el Tribunal de Cuentas realizara la fiscalización de las campañas de publicidad del Ministerio de los años 2002, 2003 y primeros meses de 2004.
El informe final del Tribunal de Cuentas llamaba la atención sobre algunas deficiencias e irregularidades durante determinados procedimientos. La respuesta, desde el grupo parlamentario popular en el Congreso fue que se trataba de cuestiones técnicas y administrativas y no imputables al entonces ministro, que no intervenía en el procedimiento administrativo de las campañas.
Sin embargo, tras la emisión de este informe, Izquierda Unida decidió presentar una denuncia ante la Sección de Enjuiciamiento del Tribunal de Cuentas, alegando que había responsabilidad contable. El auto de este Tribunal declara que no hay "caso alguno de responsabilidad contable".