(Libertad Digital) El diario El Mundo revela este viernes que El Tunecino, de quien se cree que es el líder de la célula terrorista que llevó a cabo las matanzas de Madrid del 11-M, tenía la intención de perpetrar atentados suicidas ya a mediados de 2003. Mouhannad Almallah hizo esta revelación a la policía después de su primera detención, 13 días después de los atentados.
Los planes del Tunecino pasaban por acumular fondos por medio de actividades ilegales como "robar en bancos y joyerías" para con ellos "sufragar atentados, viajar a Afganistán para hacer la yihad, etc". Almallah explicó también a la Policía que su cuñado, Mustapha Maymouni, era "mucho más violento y radical que él". De hecho "se le podía considerar como el líder o guía de Serhane", más conocido como El Tunecino.
De acuerdo con Almallah, El Tunecino "es muy radical y quería realizar algo importante debido a su fanatismo religioso (se consideraba por encima del iman de su mezquita). Estas ideas ya las manifestó a finales de 2003". Es más, "tenía como ejemplo a seguir a Osama ben Laden". Khalid Zeimi Pardo, en prisión por su presunta implicación con el caso, también ha incidido en la radicalidad del Tunecino.
Reunión de Almallah, Ghayoun y El Tunecino
Otro dato nuevo que da a conocer la información del diario madrileño es que Mouhannad Almallah, el sirio que se afilió al PSOE de San Blas, conocía a Jamal Zougam, encarcelado por su participación en los atentados del 11-M. Zougam regentaba un locutorio en Lavapiés, al que acudió Almallah para comprar un cargador de teléfono.
No son las únicas revelaciones hechas sobre El Tunecino. Basel Ghayoun, también en la cárcel por el 11-M, acudió al domicilio de Mouhannad Almallah, de quien es amigo, a finales de 2003. Encontró allí a Serhane ben Abdelmajid Fakhet, El Tunecino. En ese momento ya expuso sus intenciones de cometer un atentado en España. Ghayoun explicó al juez que tenía planeado un atentado con móviles en el área de Embajadores. También le contó que El Tunecino dijo que tenía que arreglar unos teléfonos en la tienda de Jamal Zougam. Esta declaración ha sido confirmada por Fouad el Morabit, también en prisión, y que declaró que Ghayoun le había hablado de la reunión con Almallah y El Tunecino.