El Partido Popular no cree que las palabras del mediador Brian Currin, confirmando la existencia de un segundo tiempo de negociación entre el Gobierno y ETA, sean suficientes para elevar el tono contra José Luis Rodríguez Zapatero en la lucha antiterrorista.
Tanto es así que lo primero que hacen en Génova a la hora de valorar este nuevo indicio de sospecha es ningunear la figura de Currin, a quien ni tan siquiera consideran portavoz válido. "No sé que sentido tienen estas declaraciones", arguyó Cristóbal Montoro en rueda de prensa, erigido estas fechas portavoz de la dirección nacional.
Las fuentes consultadas por Libertad Digital ahondan en esta idea, y se preguntan "¿quién es este hombre?" para después poner el acento en que no pueden hacer virar su apoyo al Gobierno por unos indicios que consideran sin peso. Y es que, recalcan estas mismas fuentes, tanto el Ejecutivo central como el vasco "juran y perjuran" que no están manteniendo contactos.
Así las cosas, y partiendo de esta base, Motoro no dudaba en desmentir a su colega de partido Carlos Iturgaiz, que denunció en esRadio lo que Jaime Mayor Oreja no se cansa de repetir: que la negociación es ya una realidad. "No parece que estemos ante un cambio de la política antiterrorista del Gobierno", zanjó el portavoz popular.
En este sentido, el responsable de Economía del PP insistió en que la línea de su formación va a ser la misma de siempre, que es la de "mantener la vigilancia para que no pueda haber un cambio" en la lucha contra ETA. Ahí enmarca la advertencia de Iturgaiz, intentando rebajar el grado de su desautorización.
La actual lucha antiterrorista, concluyó Montoro, "es la que nos está llevando al éxito contra todos los terrorismos, también contra ETA".