LD (Pablo Montesinos) Las declaraciones de Álvarez Cascos, advirtiendo que las cosas "no se están haciendo bien" en el seno del PP, han elevado aún más la crisis interna en el partido. Así lo entienden en Génova, que ven cómo el liderazgo de Mariano Rajoy sigue sin afianzarse y que los voces anónimas empiezan a cobrar cada día más fuerza. Ya lo apuntaban la semana pasada fuentes de máxima solvencia consultadas por Libertad Digital: el problema no reside sólo en el Congreso de los Diputados sino que afecta también "a los principios y a la unidad" de la formación.
Mientras tanto, María Dolores de Cospedal sigue azuzando a los críticos. No se mete con su antecesor en el cargo -"cada uno es dueño de sus palabras y yo voy a ser dueña de mis silencios"- pero advierte a los díscolos que "todo el mundo sabe quiénes son". Eso sí, reitera que no quiere darles "demasiada trascendencia".
Sobre la crisis interna también ha hablado Esteban González Pons. En declaraciones a Punto Radio, el vicesecretario general de comunicación de los populares reconoce ahora que la candidatura de Rajoy a la Presidencia del Gobierno "puede salir bien o mal". "La democracia tiene también algo de deportivo, y es bonito que sea así", puntualiza.
Eso sí, el número tres del PP dice que "en este momento, lo cierto es que el PP ha elegido a Mariano Rajoy como líder y como candidato a la Presidencia del Gobierno y vamos a intentarlo".
Sobre las futuras citas electorales, González Pons fecha en las europeas "la clave" del futuro del partido. "Tiene algo de generales anticipadas", advierte. "Me da la sensación de que lo que pasará con el PP, o lo que pase con el propio Gobierno, depende de quién gane o quién pierda las europeas", aseveró.
Antes de las elecciones europeas, que serán el próximo verano, los populares se tendrán que enfrentar a las urnas en Galicia y el País Vasco. Unos comicios en los que -a día de hoy- las encuestas no auguran un buen resultado electoral. Fuentes consultadas por LD inciden, no obstante, en lo dicho por González Pons. Un mal resultado en sendas citas autonómicas debilitarán a Rajoy pero no lo tumbarán. Sin embargo, una derrota electoral en el Parlamento Europeo podría precipitar su caída.