Según informa El Mundo, tras la negativa del juez Santiago Pedraz a prohibir el acto de homenaje a etarras nacidos en el pueblo, este se celebró al tiempo que la localidad de Ordicia se llenaba de fotografías de presos de ETA. También un centenar de personas se manifestaron por las calles para pedir la libertad de los etarras encarcelados y colgaron una pancarta en la calle mayor con imágenes de terroristas como Mikel Otegi o Rufino Arriaga.
Una situación parecida se dio en las fiestas de Villabona, donde tres proetarras subieron al estrado para leer un discurso a favor de los presos de ETA. También hubo camisetas con la imagen de presos etarras y una gran pancarta con imágenes de presos.
Como recuerda El Mundo, es previsible que hechos como estos se repitan durante el fin de semana, cuando llega el apogeo de los festejos. Las imágenes y homenajes al entorno de la banda pondrá a prueba al Ejecutivo vasco, que se comprometió a eliminar de las calles cualquier símbolo de exaltación de ETA.