Hasta ese momento, el Congreso de Víctimas había transcurrido sin incidentes, salvo los denunciados por Pilar Manjón, presidenta de la Asociación 11-M, que aseguró haber sido increpada por un asistente que la dijo: "Hay otras víctimas", a lo que ella respondió, según su relato, que la gustaría "ser la última". La segunda y última jornada del Congreso había dado ya un vuelco a primera hora de la mañana cuando Peces Barba anunció en una emisora de radio que abandonaría el cargo de Alto Comisionado después del verano para dedicarse en exclusiva al último tramo de su carrera como rector de la Universidad Carlos III.
Peces Barba hizo declaraciones en las Cortes Valencianas antes de llegar al Palacio de Congresos y ya en éste ofreció una multitudinaria rueda de prensa en la que volvió a hablar de su renuncia al cargo y de las condiciones para una tregua. A continuación entró en el salón de plenos donde unas doscientas personas aguardaban su intervención, sin embargo, tras ser presentado por el rector de la Universidad San Pablo-CEU, organizadora del Congreso, unas cincuenta personas abandonaron la sala.
"Gotzone aurrera"
A continuación se pudieron oír en todo el Palacio de Congresos gritos y aplausos que congregaron a los periodistas. En medio de una nube de fotógrafos y redactores Gotzone Mora se refería a la supuesta negociación con ETA , mientras otros asistentes gritaban 'Gotzone Aurrera' ('adelante', en euskera) y aplaudían a la profesora, invitada al evento en condición de participante en el acto de clausura, que se celebrará esta tarde. Al Congreso asisten más de 600 personas, más o menos la mitad víctimas del terrorismo, 237 de la organización terrorista ETA.
Mora levantaba la voz para pedir que no se hagan reproches a las víctimas por si están al lado de uno u otro partido. "¿Cómo se puede instrumentalizar así a las víctimas que tienen su dolor encima?". En esto fue interrumpida por otra mujer de mediada edad que gritaba "¡no a la Ley de Solidaridad porque no nos van a tapar la boca, no nos van a callar con dinero!. ¡No vendemos la vida de nuestros muertos ni su memoria!". La profesora de la UPV continuó: "Ni una vez han hablado aquí de dinero sino justicia, dignidad y memoria para las personas que no están aquí porque los muertos se vuelven contra quienes les olvidan", adviritió al presidente del Gobierno.
"Que recojan información de lo que plantean porque la gente de a pie y las víctimas son las que nos dan lecciones de pedagogía y le digo a Zapatero que tenga cuidado porque la realidad es muy contundente y muy dura y, a veces, pensando que la realidad es de otra forma, te rompes tu cabeza y la realidad sigue intacta. Que tenga cuidado", le dijo Mora al presidente del Gobierno. La profesora pasó entonces a hablar del supuesto proceso de negociación con ETA y acusó al Gobierno de tender "la mano a una banda terrorista, de la que no he oído a ningún miembro expresarse sobre la tregua". Entonces, otra de las personas que vitoreaba a la profesora gritó: "Lo de Peces Barba es una farsa", mientras otros se expresaban contra la política antiterrorista del Gobierno y se desahogaban contando sus experiencias en los atentados que les golpearon a ellos o a sus familiares.
María San Gil: "Los asesinos no son interlocutores: son enemigos"
La presidenta del PP del País Vasco, María San Gil, ha dicho que el mensaje de las víctimas en el congreso de Valencia es "un mensaje de firmeza, de contundencia, de decir muy claro que los asesinos no son interlocutores, que son enemigos y que no hay nada que negociar". San Gil criticó que el presidente del Gobierno "no haya encontrado un sólo minuto para estar con las víctimas del terrorismo, no sé qué puede tener más importante en la agenda que dar cariño y afecto a las víctimas".
El mensaje del congreso de Valencia, agregó San Gil, es que "las víctimas no quieren que se negocie con su dolor y con su pena". San Gil realizó también un "llamamiento para acudir todos" a la manifestación convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo para el próximo día 21 en Madrid.
Por su parte, el arzobispo de Valencia, Agustín García-Gasco, ha dicho en una misa en recuerdo a las víctimas que "es una grave irresponsabilidad transmitir a la sociedad mensajes ambiguos, dejando entrever que los terroristas se esconde algún valor digno de atención" ya que "indirectamente es una manera de legitimar su conducta". Durante un oficio religioso al que asistieron algunas de las víctimas del terrorismo, el arzobispo recordó que "vivir en democracia exige aislar el terrorismo" y ello es "un imperativo moral que debe traducirse en una práctica política clara y nítida, carente de fisuras y de ambigüedades".
García-Gasco insistió en que "no caben ingenuidades contra el terrorismo, ni caben aventuras ni experimentos". También indicó que "la experiencia nos muestra, con el amargo testimonio de la sangre inocente, que toda debilidad ante los terroristas acrecienta el peligro de nuevos atentados". El arzobispo señaló que "ninguna acción terrorista puede quedar impune".
Varios psicólogos y psiquiatras asistentes al congreso destacaron el importante papel que juega la sociedad en la recuperación de los afectados por atentados terroristas, porque es ahí donde las víctimas deben encontrar el apoyo y la confianza que les permita recuperar su vida cotidiana. Así lo manifestaron en la mesa redonda sobre "Secuelas psicológicas en las víctimas del terrorismo: vías de superación", donde analizaron las claves para salir de sus traumas.
El médico psiquiatra Raúl Nehama, contó que la política, las ideologías, la actitud de los medios de comunicación o la actuación de la Justicia tras atentados terroristas son elementos que pueden llevar al victimismo de los afectados. A partir de su experiencia con varios miembros de la AVT, indicó que a los sentimientos de miedo, dolor y horror, se les puede añadir la sensación de agravio, injusticia u olvido, por lo que es imprescindible que las víctimas recuperen ese sentimiento de confianza "imprescindible para vivir tranquilo".
