El secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, ha asegurado que no piensa dimitir tras su imputación por un supuesto delito de prevaricación y malversación de fondos públicos por las subvenciones concedidas a la Fundación Alternativas porque estas ayudas fueron asignadas de acuerdo con la ley.
En rueda de prensa en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, López Garrido ha asegurado que las dos subvenciones a esta fundación por las que el centro jurídico Tomás Moro se querelló contra él se adjudicaron cuando ya no formaba parte del patronato de la Fundación Alternativas, un cargo que dejó pocos días después de ser nombrado secretario de Estado, en abril de 2008. Sin embargo, los documentos no le avalan. López Garrido fue nombrado el 13 de abril de 2008 secretario de Estado para la UE y el 22 de julio de ese año y el 28 de abril del siguiente otorgó subvenciones a la Fundación Alternativas de la que aún era patrono. La carta en la que dice que anunciaba su baja no tiene fecha de salida.
"Cuando se aplica y se cumple la ley estrictamente no hay razones para tomar una decisión de este tipo", ha contestado López Garrido cuando los periodistas le han planteado la posibilidad de dimitir. Se ha mostrado convencido de que la querella hoy admitida a trámite por el juez "no tiene ningún fundamento ni la más mínima base legal" y ha garantizado su plena disposición a colaborar con la Justicia para esclarecer este asunto. López Garrido ha admitido que la admisión a tramite de la querella le ha "amargado" su santo, que es hoy.
El secretario de Estado ha hecho hincapié en que se dio de baja pocos días después de entrar en el Gobierno con una carta que envío al presidente de la Fundación, Pere Portabella. En su opinión, este trámite fue suficiente para dar por hecho que dejaba de estar en el patronato. "Estos son los procedimientos que hay. No conozco otros", ha añadido para rebatir el argumento del denunciante de que esa carta no tiene valor jurídico.
Donde más énfasis ha hecho es en que las ayudas "se ajustaron a la más estricta legalidad, transparencia y publicidad" después de superar el proceso de selección habitual. Los dos proyectos subvencionados de los que habla la querella tuvieron como fin hacer una encuesta sobre la opinión de los españolas acerca de la UE y crear una página web sobre Europa.
El secretario de Estado ha defendido el derecho de la Fundación Alternativas a recibir estos fondos y no ha considerado irregular que él estuviera ligado a ella hasta abril de 2008. "No es una incompatibilidad ni legal, ni moral", ha remarcado López Garrido.